
Brasil ha dado un paso decisivo hacia fronteras sin papel. En una entrevista publicada el 29 de diciembre, altos funcionarios del Ministerio de Turismo confirmaron que la visa electrónica para visitantes (e-Visa), relanzada en abril para ciudadanos de Estados Unidos, Canadá y Australia, será ahora la base de un ecosistema biométrico más amplio que incluirá a varios países vecinos de Sudamérica.
Según el plan, Brasil, Perú, Colombia y Uruguay han creado un grupo de trabajo conjunto para definir un estándar de interfaz de programación de aplicaciones (API) que permitirá a los cuatro países emitir e-Visas, recopilar datos biométricos mediante selfies y compartir información anticipada de pasajeros en tiempo real. La primera prueba de concepto, llamada “Cross-Border Wallet” (Billetera Transfronteriza), almacenará la e-Visa de Brasil con código QR junto con una imagen facial verificada en tiempo real, que podrá ser leída en los nuevos e-gates instalados en los aeropuertos de São Paulo/Guarulhos y Río/Galeão. Se espera una beta cerrada con viajeros corporativos seleccionados y tripulaciones aéreas para el segundo trimestre de 2026.
Para facilitar aún más la transición a la e-Visa brasileña, los viajeros y departamentos de recursos humanos pueden recurrir a VisaHQ, que ofrece una plataforma de solicitud completamente en línea, alertas de estado en tiempo real y soporte experto; el servicio para Brasil está disponible en https://www.visahq.com/brazil/.
Las autoridades aseguran que el proyecto reducirá las filas y proporcionará a las fuerzas fronterizas información anticipada sobre pasajeros de alto riesgo. Para las multinacionales, las ventajas son evidentes: tiempos de asignación más rápidos, menores costos en manejo de documentos y seguimiento de viajes en tiempo real en cuatro jurisdicciones. Sin embargo, se insta a los responsables de recursos humanos a revisar las políticas de privacidad, ya que las plantillas biométricas serán compartidas entre gobiernos.
Las aerolíneas que operan en Brasil han comenzado a instalar lectores compatibles con los e-gates, y el Ministerio de Justicia está elaborando una portaría que exigirá a todos los aeropuertos internacionales aceptar la credencial digital para diciembre de 2026. El uso de la billetera será opcional —los pasaportes en papel seguirán siendo aceptados—, pero la dirección clara del gobierno apunta hacia fronteras completamente digitales.
Los asesores en inmigración recomiendan que las empresas actualicen sus políticas de movilidad, incluyan referencias al código QR de la e-Visa en las cartas de invitación y aseguren que los viajeros lleven el pasaporte físico asociado a la credencial hasta que se autorice el viaje sin pasaporte. También advierten que los agentes fronterizos podrían tardar en adaptarse a la coexistencia de documentos físicos y digitales durante el período de transición.
A largo plazo, Brasilia espera que el esquema evolucione hacia un equivalente latinoamericano del Digital Travel Credential europeo, otorgando a la región una ventaja competitiva para atraer turistas de alto gasto y especialistas técnicos de corta duración.
Según el plan, Brasil, Perú, Colombia y Uruguay han creado un grupo de trabajo conjunto para definir un estándar de interfaz de programación de aplicaciones (API) que permitirá a los cuatro países emitir e-Visas, recopilar datos biométricos mediante selfies y compartir información anticipada de pasajeros en tiempo real. La primera prueba de concepto, llamada “Cross-Border Wallet” (Billetera Transfronteriza), almacenará la e-Visa de Brasil con código QR junto con una imagen facial verificada en tiempo real, que podrá ser leída en los nuevos e-gates instalados en los aeropuertos de São Paulo/Guarulhos y Río/Galeão. Se espera una beta cerrada con viajeros corporativos seleccionados y tripulaciones aéreas para el segundo trimestre de 2026.
Para facilitar aún más la transición a la e-Visa brasileña, los viajeros y departamentos de recursos humanos pueden recurrir a VisaHQ, que ofrece una plataforma de solicitud completamente en línea, alertas de estado en tiempo real y soporte experto; el servicio para Brasil está disponible en https://www.visahq.com/brazil/.
Las autoridades aseguran que el proyecto reducirá las filas y proporcionará a las fuerzas fronterizas información anticipada sobre pasajeros de alto riesgo. Para las multinacionales, las ventajas son evidentes: tiempos de asignación más rápidos, menores costos en manejo de documentos y seguimiento de viajes en tiempo real en cuatro jurisdicciones. Sin embargo, se insta a los responsables de recursos humanos a revisar las políticas de privacidad, ya que las plantillas biométricas serán compartidas entre gobiernos.
Las aerolíneas que operan en Brasil han comenzado a instalar lectores compatibles con los e-gates, y el Ministerio de Justicia está elaborando una portaría que exigirá a todos los aeropuertos internacionales aceptar la credencial digital para diciembre de 2026. El uso de la billetera será opcional —los pasaportes en papel seguirán siendo aceptados—, pero la dirección clara del gobierno apunta hacia fronteras completamente digitales.
Los asesores en inmigración recomiendan que las empresas actualicen sus políticas de movilidad, incluyan referencias al código QR de la e-Visa en las cartas de invitación y aseguren que los viajeros lleven el pasaporte físico asociado a la credencial hasta que se autorice el viaje sin pasaporte. También advierten que los agentes fronterizos podrían tardar en adaptarse a la coexistencia de documentos físicos y digitales durante el período de transición.
A largo plazo, Brasilia espera que el esquema evolucione hacia un equivalente latinoamericano del Digital Travel Credential europeo, otorgando a la región una ventaja competitiva para atraer turistas de alto gasto y especialistas técnicos de corta duración.






