
Los pasajeros que volaban desde Dublín esta semana festiva encontraron una opción inesperada en las pantallas de salidas: el servicio inaugural de SkyUp Airlines entre Dublín y Chisináu. La aerolínea fundada en Ucrania, ahora operando bajo una licencia de la UE, comenzó sus vuelos dos veces por semana el 18 de diciembre y completó su primera semana comercial completa ayer (24 de diciembre). Los vuelos salen de Dublín los martes y jueves por la noche, llegando a la capital de Moldavia poco después de la medianoche hora local y regresando en las primeras horas de la mañana, ofreciendo conexiones convenientes el mismo día para viajeros de negocios y visitas a familiares y amigos.
Aunque Moldavia está fuera de la UE y del espacio Schengen, se ha convertido en un mercado en crecimiento para empleadores irlandeses en agrotecnología y externalización de TI que necesitan acceso de corto recorrido para sus equipos de proyecto. Hasta ahora, los viajeros irlandeses enfrentaban itinerarios con múltiples escalas vía Londres, Viena o Bucarest. Los vuelos directos reducen el tiempo de viaje en 3 a 4 horas y eliminan la necesidad de una visa de tránsito adicional para Reino Unido o Schengen, un beneficio que, según asesores migratorios, reducirá los costos administrativos para los asignados.
Para quienes deben gestionar estas cuestiones de visado, VisaHQ puede simplificar el proceso. El equipo con base en Dublín (https://www.visahq.com/ireland/) ofrece solicitudes rápidas en línea, seguimiento en tiempo real y asesoría experta tanto para las visas C de corta estancia irlandesas para ciudadanos moldavos como para las normas de exención de visa de Moldavia para titulares de pasaporte irlandés, asegurando que los planificadores de movilidad cumplan con la normativa sin complicaciones burocráticas.
SkyUp utiliza inicialmente un Boeing 737-800 con 189 asientos y ofrece tarifas de lanzamiento desde 89 € solo ida, hasta un 40 % más económicas que las aerolíneas tradicionales. La Autoridad del Aeropuerto de Dublín (DAA) ha apoyado la ruta con un reembolso de marketing por un año dentro de su programa “Europa Emergente”, diseñado para diversificar la conectividad aérea de Irlanda tras el Brexit. Los comentarios de los pasajeros en los primeros vuelos fueron positivos, con varios viajeros de negocios diciendo a medios locales que el servicio es “brillante” para abrir un mercado poco conocido a los exportadores irlandeses.
Para los gestores de movilidad, el nuevo enlace ofrece ventajas prácticas. Los ciudadanos moldavos pueden entrar a Irlanda con visas C de corta estancia que actualmente tardan seis semanas en tramitarse; eliminar las escalas reduce el riesgo de retrasos en la visa Schengen. Por su parte, el personal irlandés que viaja a Chisináu sigue beneficiándose de la entrada sin visa por 90 días a Moldavia. Sin embargo, los equipos de cuidado y seguridad deben informar a los viajeros sobre el conflicto no resuelto en Transnistria, en la frontera oriental de Moldavia, y desaconsejar viajes a esa región.
Si la ocupación supera el 70 %, SkyUp considera añadir un vuelo los sábados a partir del verano de 2026. Ryanair ya ha insinuado que podría entrar en el mercado Dublín–Chisináu, lo que podría estimular una mayor competencia en tarifas. Por ahora, la primera conexión directa de Irlanda con una de las capitales menos visitadas de Europa representa una pequeña pero significativa expansión del alcance global de la movilidad del país.
Aunque Moldavia está fuera de la UE y del espacio Schengen, se ha convertido en un mercado en crecimiento para empleadores irlandeses en agrotecnología y externalización de TI que necesitan acceso de corto recorrido para sus equipos de proyecto. Hasta ahora, los viajeros irlandeses enfrentaban itinerarios con múltiples escalas vía Londres, Viena o Bucarest. Los vuelos directos reducen el tiempo de viaje en 3 a 4 horas y eliminan la necesidad de una visa de tránsito adicional para Reino Unido o Schengen, un beneficio que, según asesores migratorios, reducirá los costos administrativos para los asignados.
Para quienes deben gestionar estas cuestiones de visado, VisaHQ puede simplificar el proceso. El equipo con base en Dublín (https://www.visahq.com/ireland/) ofrece solicitudes rápidas en línea, seguimiento en tiempo real y asesoría experta tanto para las visas C de corta estancia irlandesas para ciudadanos moldavos como para las normas de exención de visa de Moldavia para titulares de pasaporte irlandés, asegurando que los planificadores de movilidad cumplan con la normativa sin complicaciones burocráticas.
SkyUp utiliza inicialmente un Boeing 737-800 con 189 asientos y ofrece tarifas de lanzamiento desde 89 € solo ida, hasta un 40 % más económicas que las aerolíneas tradicionales. La Autoridad del Aeropuerto de Dublín (DAA) ha apoyado la ruta con un reembolso de marketing por un año dentro de su programa “Europa Emergente”, diseñado para diversificar la conectividad aérea de Irlanda tras el Brexit. Los comentarios de los pasajeros en los primeros vuelos fueron positivos, con varios viajeros de negocios diciendo a medios locales que el servicio es “brillante” para abrir un mercado poco conocido a los exportadores irlandeses.
Para los gestores de movilidad, el nuevo enlace ofrece ventajas prácticas. Los ciudadanos moldavos pueden entrar a Irlanda con visas C de corta estancia que actualmente tardan seis semanas en tramitarse; eliminar las escalas reduce el riesgo de retrasos en la visa Schengen. Por su parte, el personal irlandés que viaja a Chisináu sigue beneficiándose de la entrada sin visa por 90 días a Moldavia. Sin embargo, los equipos de cuidado y seguridad deben informar a los viajeros sobre el conflicto no resuelto en Transnistria, en la frontera oriental de Moldavia, y desaconsejar viajes a esa región.
Si la ocupación supera el 70 %, SkyUp considera añadir un vuelo los sábados a partir del verano de 2026. Ryanair ya ha insinuado que podría entrar en el mercado Dublín–Chisináu, lo que podría estimular una mayor competencia en tarifas. Por ahora, la primera conexión directa de Irlanda con una de las capitales menos visitadas de Europa representa una pequeña pero significativa expansión del alcance global de la movilidad del país.








