
La política china de tránsito sin visa de 240 horas, vigente desde hace un año, está dando resultados visibles. Nuevas cifras publicadas el 19 de diciembre por la Administración Nacional de Inmigración (NIA) muestran que 40,6 millones de extranjeros ingresaron a China en los últimos doce meses, un aumento del 27,2 % interanual. Más significativo aún, el uso del esquema de tránsito —que permite a viajeros de 55 países permanecer hasta diez días en China sin visa cuando están de paso hacia un tercer destino— creció un 60,8 % en comparación con el periodo anterior a la unificación y extensión de la política.
El programa reemplazó las opciones fragmentadas de tránsito de 72 y 144 horas el 17 de diciembre de 2024, otorgando a los pasajeros de larga distancia más tiempo para realizar reuniones, visitar fábricas o explorar los principales destinos turísticos de China. Actualmente cubre 65 puertos en 24 regiones a nivel provincial, tras la incorporación en noviembre de la Terminal de Ferry Pazhou en Guangzhou, Hengqin, el Puerto de Zhongshan, el Puente Hong Kong-Zhuhai-Macao y la Estación West Kowloon. Indonesia fue la última nacionalidad en beneficiarse, desde junio de 2025.
Para los viajeros que se preguntan si su itinerario o pasaporte cumplen con los requisitos, VisaHQ ofrece un recurso práctico y completo. Su página sobre China (https://www.visahq.com/china/) detalla las normas del tránsito de 240 horas, enumera los puertos y nacionalidades elegibles, y puede gestionar visas completas cuando la exención no es suficiente, ayudando a los visitantes a evitar errores costosos antes de embarcar.
Beijing sigue siendo la gran beneficiada, con 3,4 millones de llegadas bajo esta política, lo que representa el 55 % del total de visitantes extranjeros a la capital. Los hoteleros en Shanghái y Shenzhen reportan un crecimiento de ocupación de dos dígitos impulsado por viajeros en tránsito que ahora añaden una breve estancia en lugar de conectar inmediatamente. Las aerolíneas internacionales también están ajustando sus horarios para aprovechar al máximo la ventana de 240 horas; Lufthansa, por ejemplo, adelantó dos horas su salida Frankfurt-Shanghái para que los pasajeros con destino a Europa puedan disfrutar de seis días completos en el continente sin visa.
Para las multinacionales, la extensión elimina una de las últimas barreras para traer especialistas y clientes a corto plazo. Las empresas ya no tienen que presupuestar costosas tarifas de visa ni considerar los tiempos de procesamiento consular, haciendo a China más competitiva para conferencias regionales y servicios de última hora. Sin embargo, los gestores de viajes deben asegurarse de que los empleados permanezcan en las ciudades permitidas y salgan a tiempo, ya que las estancias prolongadas siguen conllevando multas y posibles prohibiciones de entrada. Con las cifras de llegadas acercándose finalmente a los niveles prepandemia, la NIA insinuó que en 2026 podrían añadirse más nacionalidades, en un esfuerzo de China por atraer inversión extranjera.
El programa reemplazó las opciones fragmentadas de tránsito de 72 y 144 horas el 17 de diciembre de 2024, otorgando a los pasajeros de larga distancia más tiempo para realizar reuniones, visitar fábricas o explorar los principales destinos turísticos de China. Actualmente cubre 65 puertos en 24 regiones a nivel provincial, tras la incorporación en noviembre de la Terminal de Ferry Pazhou en Guangzhou, Hengqin, el Puerto de Zhongshan, el Puente Hong Kong-Zhuhai-Macao y la Estación West Kowloon. Indonesia fue la última nacionalidad en beneficiarse, desde junio de 2025.
Para los viajeros que se preguntan si su itinerario o pasaporte cumplen con los requisitos, VisaHQ ofrece un recurso práctico y completo. Su página sobre China (https://www.visahq.com/china/) detalla las normas del tránsito de 240 horas, enumera los puertos y nacionalidades elegibles, y puede gestionar visas completas cuando la exención no es suficiente, ayudando a los visitantes a evitar errores costosos antes de embarcar.
Beijing sigue siendo la gran beneficiada, con 3,4 millones de llegadas bajo esta política, lo que representa el 55 % del total de visitantes extranjeros a la capital. Los hoteleros en Shanghái y Shenzhen reportan un crecimiento de ocupación de dos dígitos impulsado por viajeros en tránsito que ahora añaden una breve estancia en lugar de conectar inmediatamente. Las aerolíneas internacionales también están ajustando sus horarios para aprovechar al máximo la ventana de 240 horas; Lufthansa, por ejemplo, adelantó dos horas su salida Frankfurt-Shanghái para que los pasajeros con destino a Europa puedan disfrutar de seis días completos en el continente sin visa.
Para las multinacionales, la extensión elimina una de las últimas barreras para traer especialistas y clientes a corto plazo. Las empresas ya no tienen que presupuestar costosas tarifas de visa ni considerar los tiempos de procesamiento consular, haciendo a China más competitiva para conferencias regionales y servicios de última hora. Sin embargo, los gestores de viajes deben asegurarse de que los empleados permanezcan en las ciudades permitidas y salgan a tiempo, ya que las estancias prolongadas siguen conllevando multas y posibles prohibiciones de entrada. Con las cifras de llegadas acercándose finalmente a los niveles prepandemia, la NIA insinuó que en 2026 podrían añadirse más nacionalidades, en un esfuerzo de China por atraer inversión extranjera.







