
En el foro empresarial anual hispano-británico celebrado en Londres el 11 de diciembre, Amparo López Senovilla, Secretaria de Estado de Comercio de España, presentó una propuesta para un corredor recíproco de exención de visado de 90 días que permitiría a técnicos, consultores y ejecutivos realizar asignaciones a corto plazo sin necesidad de patrocinio en ninguno de los dos países. Este esquema abarcaría a los denominados proveedores de servicios ‘Modo 4’, es decir, personal que viaja para instalar equipos, solucionar problemas de software o asesorar a clientes in situ.
Desde el Brexit, la mayoría de las actividades remuneradas en el Reino Unido requieren un costoso visado de Trabajador Cualificado o Trabajador Temporal (Proveedor de Servicios), mientras que los profesionales británicos enviados a España deben solicitar una autorización laboral local si la estancia supera las limitadas excepciones para visitantes de negocios establecidas en la legislación europea. Las multinacionales se quejan de que las tasas de tramitación, los recargos sanitarios y los tiempos administrativos pueden desbaratar los plazos ajustados de los proyectos y añadir miles de euros a los presupuestos.
Según la propuesta española, los trabajadores debidamente cualificados podrían pasar hasta 90 días en cualquier período de 180 días en el país anfitrión realizando tareas facturables, siempre que su empleador siga siendo responsable del salario y las cotizaciones sociales en su país de origen. Aún queda por negociar la coordinación fiscal y el estatus de los familiares acompañantes; Madrid sugiere replicar las normas vigentes para desplazamientos a corto plazo dentro de la UE.
Las empresas y particulares que enfrentan el complejo entorno actual de visados también pueden apoyarse en plataformas especializadas como VisaHQ, que gestiona la documentación y la programación de citas para permisos tanto españoles como británicos. Su portal en línea (https://www.visahq.com/spain/) ofrece listas de verificación actualizadas, seguimiento en tiempo real del estado de las solicitudes y soporte experto, recursos que seguirán siendo esenciales hasta, y después de, que cualquier exención de 90 días se haga realidad.
Los grupos empresariales de ambos lados del Canal de la Mancha recibieron con agrado el anuncio, calificándolo como un ‘modelo’ para acuerdos de movilidad sectoriales entre el Reino Unido y miembros individuales de la UE. Sin embargo, el Ministerio del Interior británico necesitaría una legislación primaria para crear una nueva categoría de exención, y los analistas consideran optimista su implementación antes de finales de 2026.
Mientras tanto, se recomienda a los equipos de recursos humanos y movilidad que planifiquen las rutas de despliegue de talento, sigan las consultas del gobierno británico y mantengan presupuestos de contingencia para las vías de visado existentes. De aprobarse, la exención podría reducir drásticamente los costes de cumplimiento, acelerar la entrega de proyectos y ser un salvavidas para las pymes que no cuentan con recursos para gestionar el patrocinio completo de visados.
Desde el Brexit, la mayoría de las actividades remuneradas en el Reino Unido requieren un costoso visado de Trabajador Cualificado o Trabajador Temporal (Proveedor de Servicios), mientras que los profesionales británicos enviados a España deben solicitar una autorización laboral local si la estancia supera las limitadas excepciones para visitantes de negocios establecidas en la legislación europea. Las multinacionales se quejan de que las tasas de tramitación, los recargos sanitarios y los tiempos administrativos pueden desbaratar los plazos ajustados de los proyectos y añadir miles de euros a los presupuestos.
Según la propuesta española, los trabajadores debidamente cualificados podrían pasar hasta 90 días en cualquier período de 180 días en el país anfitrión realizando tareas facturables, siempre que su empleador siga siendo responsable del salario y las cotizaciones sociales en su país de origen. Aún queda por negociar la coordinación fiscal y el estatus de los familiares acompañantes; Madrid sugiere replicar las normas vigentes para desplazamientos a corto plazo dentro de la UE.
Las empresas y particulares que enfrentan el complejo entorno actual de visados también pueden apoyarse en plataformas especializadas como VisaHQ, que gestiona la documentación y la programación de citas para permisos tanto españoles como británicos. Su portal en línea (https://www.visahq.com/spain/) ofrece listas de verificación actualizadas, seguimiento en tiempo real del estado de las solicitudes y soporte experto, recursos que seguirán siendo esenciales hasta, y después de, que cualquier exención de 90 días se haga realidad.
Los grupos empresariales de ambos lados del Canal de la Mancha recibieron con agrado el anuncio, calificándolo como un ‘modelo’ para acuerdos de movilidad sectoriales entre el Reino Unido y miembros individuales de la UE. Sin embargo, el Ministerio del Interior británico necesitaría una legislación primaria para crear una nueva categoría de exención, y los analistas consideran optimista su implementación antes de finales de 2026.
Mientras tanto, se recomienda a los equipos de recursos humanos y movilidad que planifiquen las rutas de despliegue de talento, sigan las consultas del gobierno británico y mantengan presupuestos de contingencia para las vías de visado existentes. De aprobarse, la exención podría reducir drásticamente los costes de cumplimiento, acelerar la entrega de proyectos y ser un salvavidas para las pymes que no cuentan con recursos para gestionar el patrocinio completo de visados.










