
La Policía Federal de Brasil (PF) sacudió a la comunidad corporativa de inmigración del país el 11 de diciembre al publicar discretamente su último Boletín Administrativo en el registro de la Ley de Migración y, por primera vez, revelar los nombres completos de decenas de extranjeros multados por infracciones migratorias. El boletín, divulgado a última hora del 9 de diciembre pero descubierto por asesores el 11, detalla sanciones que van desde multas leves de R$100 por trámites hasta una penalización de R$7,200 por exceder el tiempo de estadía.
Según la Ley de Migración brasileña, todo extranjero que no ingrese como turista —ya sea con permiso de trabajo, estudiante, nómada digital o dependiente— debe presentarse en persona en una oficina de la PF dentro de los 30 días posteriores a su llegada para ser fotografiado, tomar sus huellas digitales y presentar documentos originales. Este requisito también aplica a quienes poseen visas electrónicas emitidas en el extranjero. El incumplimiento genera multas automáticas que aumentan con cada día de retraso y, en casos extremos, pueden poner en riesgo la renovación de visas o incluso derivar en procesos de deportación.
Empresas y viajeros que buscan una guía integral para cumplir con las normas migratorias en Brasil pueden apoyarse en VisaHQ. La plataforma, a través de su portal para Brasil (https://www.visahq.com/brazil/), centraliza los requisitos de visa, listas de documentos y seguimiento en tiempo real de las solicitudes. Además, su equipo de conserjería puede reservar citas para el registro en la PF o gestionar apostillas, ayudando a los departamentos de recursos humanos a evitar que sus empleados aparezcan en la próxima lista de “nombres y vergüenzas”.
Esta estrategia de “nombrar y avergonzar” ha llamado la atención de empleadores multinacionales. Los responsables de movilidad global reportan que los asignados ahora exigen comprobantes de registro puntual, y algunas empresas ya integran recordatorios de citas en la PF dentro de sus sistemas de gestión de recursos humanos (HRIS). Abogados especializados en inmigración señalan que el boletín refleja un aumento significativo en las multas respecto a publicaciones anteriores y evidencia el impulso de la PF por digitalizar procesos y hacer cumplir los plazos, de cara a la fusión de sistemas prevista para enero de 2026 con la plataforma de acceso único gov.br.
En la práctica, se recomienda a los empleadores agendar las citas en la PF antes de que el empleado llegue al país, conservar copias escaneadas de sellos de entrada o tarjetas de embarque como prueba del inicio del plazo de 30 días, y prever tiempo adicional en ciudades como São Paulo, Río de Janeiro y Belo Horizonte, donde las oficinas regionales de la PF exigen cada vez más documentos originales apostillados. También deben estar preparados para pagar multas en línea a través de PagTesouro, ya que los comprobantes de pago en papel están siendo eliminados.
Para los asignados, el mensaje es claro: el registro dejó de ser una formalidad que se puede postergar. Con Brasil esperando un récord de llegadas internacionales para eventos como la COP-30 en 2026, la PF advierte que el cumplimiento será público y costoso para quienes no se ajusten a las normas.
Según la Ley de Migración brasileña, todo extranjero que no ingrese como turista —ya sea con permiso de trabajo, estudiante, nómada digital o dependiente— debe presentarse en persona en una oficina de la PF dentro de los 30 días posteriores a su llegada para ser fotografiado, tomar sus huellas digitales y presentar documentos originales. Este requisito también aplica a quienes poseen visas electrónicas emitidas en el extranjero. El incumplimiento genera multas automáticas que aumentan con cada día de retraso y, en casos extremos, pueden poner en riesgo la renovación de visas o incluso derivar en procesos de deportación.
Empresas y viajeros que buscan una guía integral para cumplir con las normas migratorias en Brasil pueden apoyarse en VisaHQ. La plataforma, a través de su portal para Brasil (https://www.visahq.com/brazil/), centraliza los requisitos de visa, listas de documentos y seguimiento en tiempo real de las solicitudes. Además, su equipo de conserjería puede reservar citas para el registro en la PF o gestionar apostillas, ayudando a los departamentos de recursos humanos a evitar que sus empleados aparezcan en la próxima lista de “nombres y vergüenzas”.
Esta estrategia de “nombrar y avergonzar” ha llamado la atención de empleadores multinacionales. Los responsables de movilidad global reportan que los asignados ahora exigen comprobantes de registro puntual, y algunas empresas ya integran recordatorios de citas en la PF dentro de sus sistemas de gestión de recursos humanos (HRIS). Abogados especializados en inmigración señalan que el boletín refleja un aumento significativo en las multas respecto a publicaciones anteriores y evidencia el impulso de la PF por digitalizar procesos y hacer cumplir los plazos, de cara a la fusión de sistemas prevista para enero de 2026 con la plataforma de acceso único gov.br.
En la práctica, se recomienda a los empleadores agendar las citas en la PF antes de que el empleado llegue al país, conservar copias escaneadas de sellos de entrada o tarjetas de embarque como prueba del inicio del plazo de 30 días, y prever tiempo adicional en ciudades como São Paulo, Río de Janeiro y Belo Horizonte, donde las oficinas regionales de la PF exigen cada vez más documentos originales apostillados. También deben estar preparados para pagar multas en línea a través de PagTesouro, ya que los comprobantes de pago en papel están siendo eliminados.
Para los asignados, el mensaje es claro: el registro dejó de ser una formalidad que se puede postergar. Con Brasil esperando un récord de llegadas internacionales para eventos como la COP-30 en 2026, la PF advierte que el cumplimiento será público y costoso para quienes no se ajusten a las normas.







