
A partir del 1 de diciembre, aunque confirmado por las oficinas de empleo solo durante el fin de semana, Polonia ha aumentado la tarifa para registrar una *oświadczenie o powierzeniu wykonywania pracy cudzoziemcowi* de 100 PLN a 400 PLN. Esta declaración, válida por hasta seis meses, es la vía más utilizada para contratar trabajadores extranjeros temporales y de baja cualificación, especialmente ucranianos y bielorrusos.
El cambio forma parte de cuatro reglamentos ejecutivos que implementan la nueva Ley sobre las Condiciones para la Admisibilidad de la Confianza de Trabajo a Extranjeros, destinada a profesionalizar los canales de reclutamiento y frenar abusos. Paralelamente, el Ministerio de Familia, Trabajo y Política Social ha eliminado a Georgia de la lista de nacionalidades elegibles para el procedimiento simplificado, dejando solo a armenios, bielorrusos, moldavos y ucranianos.
Para los empleadores, el impacto inmediato es económico: un costo adicional de 300 PLN por cada trabajador temporal extranjero, pero la consecuencia más importante es estratégica. Muchas empresas de agroalimentación, logística y manufactura dependían de esta vía económica para gestionar picos cortos de producción. Ahora, los departamentos de recursos humanos deberán incluir las tarifas gubernamentales más altas en sus presupuestos y podrían encontrar más rentable optar por los procedimientos estándar de permisos de trabajo que permiten estancias más largas.
El aumento de la tarifa también reduce la oportunidad de arbitraje que alimentaba un mercado gris de declaraciones pre-registradas vendidas en línea. Las autoridades indican que el incremento financiará inspectores adicionales de cumplimiento, con facultades para auditar a los empleadores en un plazo de 72 horas desde la fecha de inicio del trabajador. Se recomienda a las empresas revisar sus listas internas de incorporación y asegurar la notificación oportuna a la Institución de Seguro Social (ZUS), ya que el incumplimiento podría acarrear multas de hasta 30,000 PLN.
El cambio forma parte de cuatro reglamentos ejecutivos que implementan la nueva Ley sobre las Condiciones para la Admisibilidad de la Confianza de Trabajo a Extranjeros, destinada a profesionalizar los canales de reclutamiento y frenar abusos. Paralelamente, el Ministerio de Familia, Trabajo y Política Social ha eliminado a Georgia de la lista de nacionalidades elegibles para el procedimiento simplificado, dejando solo a armenios, bielorrusos, moldavos y ucranianos.
Para los empleadores, el impacto inmediato es económico: un costo adicional de 300 PLN por cada trabajador temporal extranjero, pero la consecuencia más importante es estratégica. Muchas empresas de agroalimentación, logística y manufactura dependían de esta vía económica para gestionar picos cortos de producción. Ahora, los departamentos de recursos humanos deberán incluir las tarifas gubernamentales más altas en sus presupuestos y podrían encontrar más rentable optar por los procedimientos estándar de permisos de trabajo que permiten estancias más largas.
El aumento de la tarifa también reduce la oportunidad de arbitraje que alimentaba un mercado gris de declaraciones pre-registradas vendidas en línea. Las autoridades indican que el incremento financiará inspectores adicionales de cumplimiento, con facultades para auditar a los empleadores en un plazo de 72 horas desde la fecha de inicio del trabajador. Se recomienda a las empresas revisar sus listas internas de incorporación y asegurar la notificación oportuna a la Institución de Seguro Social (ZUS), ya que el incumplimiento podría acarrear multas de hasta 30,000 PLN.








