
El operador aeroportuario Groupe ADP ha elegido la última reunión del consejo de 2025 para publicar el borrador del Contrato de Regulación Económica (CRE 2027-34) que determinará cuánto puede invertir y cuánto puede cobrar a las aerolíneas durante los próximos ocho años. La cifra principal es llamativa: 8.400 millones de euros en gastos de capital, es decir, algo más de 1.000 millones al año, destinados principalmente a ampliar la capacidad y a mejoras medioambientales en los dos principales hubs parisinos, Charles-de-Gaulle (CDG) y Orly (ORY). Para 2034, el grupo espera que estas obras permitan atender a 18 millones de pasajeros adicionales al año, manteniendo el crecimiento de los costes regulados cercano al índice de precios al consumidor francés.
Detrás de estas cifras hay un delicado equilibrio. El CRE limita el retorno regulado sobre el capital de ADP a un promedio del 5,9%, mientras permite que las tarifas a las aerolíneas aumenten en un 2,6% por encima del IPC, un incremento más pronunciado que en el contrato actual, pero aún inferior a las tarifas de hubs rivales como Londres-Heathrow o Frankfurt. Philippe Pascal, director ejecutivo de ADP, aseguró que esta fórmula tarifaria mantendrá la competitividad de París, incluso mientras la compañía lleva a cabo niveles de inversión “históricos”.
Los viajeros de negocios que gestionan múltiples destinos deben tener en cuenta la documentación: la plataforma digital de VisaHQ (https://www.visahq.com/france/) permite a empresas y viajeros individuales verificar al instante los requisitos de visado para Francia y conectar itinerarios que pasen por CDG o ORY con solicitudes integradas para países de destino posteriores, ayudando a los gestores de viajes a sincronizar los plazos documentales con las próximas fases de construcción de ADP.
Para los gestores de viajes corporativos, los cambios más palpables se notarán en tierra. CDG contará con un nuevo muelle remoto conectado por un tren automatizado, Orly consolidará las zonas de facturación y ambos aeropuertos acelerarán la instalación de mostradores de autoentrega de equipaje y puertas biométricas. ADP también destinará 800 millones de euros a medidas de sostenibilidad, que van desde la instalación de puntos adicionales de alimentación eléctrica para aeronaves hasta equipos de servicio en tierra preparados para hidrógeno, una iniciativa diseñada para ayudar a las multinacionales a cumplir con sus objetivos de reducción de emisiones de alcance 3 en viajes de negocios.
El momento es clave. Con el nuevo Sistema de Entrada-Salida (EES) de la UE, que alarga los tiempos de procesamiento para nacionales de terceros países, los márgenes de capacidad en seguridad e inmigración serán bien recibidos. ADP asegura que el programa de modernización se ejecutará por fases para evitar cuellos de botella “al estilo olímpico”; la mayor parte de las obras pesadas se realizarán tras los Juegos Olímpicos de la Juventud de Invierno París 2026, cuando el tráfico disminuye estacionalmente. Por tanto, las empresas que gestionan desplazamientos a través de París pueden planificar en función de ventanas de obras previsibles y publicadas.
Próximos pasos: el Ministerio de Transporte francés abrirá una consulta pública de un mes sobre el borrador del CRE el 15 de diciembre, con una aprobación final prevista para marzo de 2026. Las aerolíneas ya han anunciado que presionarán para reducir los incrementos tarifarios, pero ADP sostiene que sin este aumento, los proyectos clave de adaptación climática se paralizarían. En cualquier caso, los equipos de movilidad deben prever un ligero aumento en las tasas aeroportuarias a partir de 2027, un pequeño precio, según ADP, para un acceso a París más rápido y sostenible.
Detrás de estas cifras hay un delicado equilibrio. El CRE limita el retorno regulado sobre el capital de ADP a un promedio del 5,9%, mientras permite que las tarifas a las aerolíneas aumenten en un 2,6% por encima del IPC, un incremento más pronunciado que en el contrato actual, pero aún inferior a las tarifas de hubs rivales como Londres-Heathrow o Frankfurt. Philippe Pascal, director ejecutivo de ADP, aseguró que esta fórmula tarifaria mantendrá la competitividad de París, incluso mientras la compañía lleva a cabo niveles de inversión “históricos”.
Los viajeros de negocios que gestionan múltiples destinos deben tener en cuenta la documentación: la plataforma digital de VisaHQ (https://www.visahq.com/france/) permite a empresas y viajeros individuales verificar al instante los requisitos de visado para Francia y conectar itinerarios que pasen por CDG o ORY con solicitudes integradas para países de destino posteriores, ayudando a los gestores de viajes a sincronizar los plazos documentales con las próximas fases de construcción de ADP.
Para los gestores de viajes corporativos, los cambios más palpables se notarán en tierra. CDG contará con un nuevo muelle remoto conectado por un tren automatizado, Orly consolidará las zonas de facturación y ambos aeropuertos acelerarán la instalación de mostradores de autoentrega de equipaje y puertas biométricas. ADP también destinará 800 millones de euros a medidas de sostenibilidad, que van desde la instalación de puntos adicionales de alimentación eléctrica para aeronaves hasta equipos de servicio en tierra preparados para hidrógeno, una iniciativa diseñada para ayudar a las multinacionales a cumplir con sus objetivos de reducción de emisiones de alcance 3 en viajes de negocios.
El momento es clave. Con el nuevo Sistema de Entrada-Salida (EES) de la UE, que alarga los tiempos de procesamiento para nacionales de terceros países, los márgenes de capacidad en seguridad e inmigración serán bien recibidos. ADP asegura que el programa de modernización se ejecutará por fases para evitar cuellos de botella “al estilo olímpico”; la mayor parte de las obras pesadas se realizarán tras los Juegos Olímpicos de la Juventud de Invierno París 2026, cuando el tráfico disminuye estacionalmente. Por tanto, las empresas que gestionan desplazamientos a través de París pueden planificar en función de ventanas de obras previsibles y publicadas.
Próximos pasos: el Ministerio de Transporte francés abrirá una consulta pública de un mes sobre el borrador del CRE el 15 de diciembre, con una aprobación final prevista para marzo de 2026. Las aerolíneas ya han anunciado que presionarán para reducir los incrementos tarifarios, pero ADP sostiene que sin este aumento, los proyectos clave de adaptación climática se paralizarían. En cualquier caso, los equipos de movilidad deben prever un ligero aumento en las tasas aeroportuarias a partir de 2027, un pequeño precio, según ADP, para un acceso a París más rápido y sostenible.





