
China Eastern Airlines ha comenzado a operar lo que promociona como el vuelo programado de ida más largo del mundo, conectando Shanghai Pudong con Buenos Aires vía Auckland. El primer vuelo hacia el sur, MU745, despegó a las 00:10 del 4 de diciembre y aterrizó en Argentina tras recorrer aproximadamente 20,000 km, reduciendo en más de cuatro horas el tiempo habitual del trayecto Asia-Sudamérica.
Detalles de la ruta – El servicio, que opera tres veces por semana, utiliza aviones Airbus A350-900 configurados con 288 asientos, incluyendo 42 camas reclinables en clase ejecutiva y una nueva cabina de clase económica premium dirigida a viajeros corporativos y ejecutivos del sector agroindustrial latinoamericano. Los vuelos de regreso (MU746) operan la ruta Buenos Aires–Auckland–Shanghai con cambio de tripulación en Nueva Zelanda, pero sin cambio de avión, lo que permite conexiones el mismo día hacia Beijing, Guangzhou y Chengdu.
Importancia estratégica – El lanzamiento se produce tras la firma en noviembre de un Protocolo de Servicios Aéreos entre China y Argentina que otorga a las aerolíneas chinas derechos de quinta libertad más allá de Nueva Zelanda. Para los exportadores, el “corredor sur” evita las congestionadas rutas del Pacífico Norte y entrega carne argentina y vino a distribuidores chinos un día antes, mientras que los paquetes de comercio electrónico chino llegan a Sudamérica en tan solo 48 horas.
Implicaciones para programas de movilidad – Las multinacionales con operaciones en ambos hemisferios pueden reducir los gastos diarios y de hotel asociados a largas escalas en Europa o EE. UU. Los gestores de viajes deben tener en cuenta que la tarifa directa (clase ejecutiva) tiene un precio aproximadamente un 12 % inferior a la combinación habitual de dos billetes vía Doha o Dubái.
Perspectivas – China Eastern planea solicitar a los reguladores derechos de tráfico para extender el servicio hasta São Paulo una vez que se completen las mejoras en la pista del aeropuerto Ezeiza de Buenos Aires en 2026.
Detalles de la ruta – El servicio, que opera tres veces por semana, utiliza aviones Airbus A350-900 configurados con 288 asientos, incluyendo 42 camas reclinables en clase ejecutiva y una nueva cabina de clase económica premium dirigida a viajeros corporativos y ejecutivos del sector agroindustrial latinoamericano. Los vuelos de regreso (MU746) operan la ruta Buenos Aires–Auckland–Shanghai con cambio de tripulación en Nueva Zelanda, pero sin cambio de avión, lo que permite conexiones el mismo día hacia Beijing, Guangzhou y Chengdu.
Importancia estratégica – El lanzamiento se produce tras la firma en noviembre de un Protocolo de Servicios Aéreos entre China y Argentina que otorga a las aerolíneas chinas derechos de quinta libertad más allá de Nueva Zelanda. Para los exportadores, el “corredor sur” evita las congestionadas rutas del Pacífico Norte y entrega carne argentina y vino a distribuidores chinos un día antes, mientras que los paquetes de comercio electrónico chino llegan a Sudamérica en tan solo 48 horas.
Implicaciones para programas de movilidad – Las multinacionales con operaciones en ambos hemisferios pueden reducir los gastos diarios y de hotel asociados a largas escalas en Europa o EE. UU. Los gestores de viajes deben tener en cuenta que la tarifa directa (clase ejecutiva) tiene un precio aproximadamente un 12 % inferior a la combinación habitual de dos billetes vía Doha o Dubái.
Perspectivas – China Eastern planea solicitar a los reguladores derechos de tráfico para extender el servicio hasta São Paulo una vez que se completen las mejoras en la pista del aeropuerto Ezeiza de Buenos Aires en 2026.





