
Fedasil aprovechó el Día Internacional del Voluntariado (5 de diciembre) para rendir homenaje a los 1.900 voluntarios que apoyan la vida diaria en los 105 centros de acogida de Bélgica. En un comunicado publicado el 4 de diciembre, la agencia federal destacó que los voluntarios ofrecen ayuda con las tareas, clases de idiomas, orientación cultural y mantenimiento básico, servicios que el personal no siempre puede cubrir debido a recortes presupuestarios y a la persistente sobrecapacidad.
Ruth de Ruijter, coordinadora de voluntarios de Fedasil, señaló que los centros dependen de un grupo central de colaboradores de larga trayectoria, pero que necesitan constantemente nuevos reclutas, ya que el entusiasmo disminuye con el tiempo. Las campañas de reclutamiento ahora utilizan plataformas como ‘Give a Day’ y vrijwilligerswerk.be, y durante diciembre se llevarán a cabo campañas en redes sociales. Fedasil invita a los belgas a comprometerse con tan solo una mañana a la semana, enfatizando que “no se requieren habilidades especiales, solo paciencia y una actitud abierta”.
La red de acogida de Bélgica opera a una capacidad récord —más de 36.000 plazas— pero aún deja a unos 2.600 hombres solos en lista de espera. Por ello, los voluntarios juegan un papel crucial para garantizar un nivel mínimo de vida y para crear vínculos entre los centros y las comunidades locales. Su presencia también reduce riesgos reputacionales para empleadores y municipios que acogen a grandes poblaciones migrantes, promoviendo una integración más fluida y disminuyendo la probabilidad de tensiones sociales.
Para los gestores de movilidad global, las oportunidades de colaboración con Fedasil pueden formar parte de una estrategia de responsabilidad social corporativa, además de ofrecer beneficios prácticos: programas de mentoría, tutorías de idiomas o patrocinio de eventos deportivos y culturales pueden acelerar la integración de los familiares de los empleados y generar buena voluntad con las autoridades locales que gestionan permisos de trabajo y residencia.
Se anima a las multinacionales a difundir internamente la convocatoria de voluntariado y a explorar políticas de permiso remunerado para voluntariado, que pueden mejorar el compromiso de los empleados y fortalecer la reputación corporativa en el competitivo mercado laboral belga. Las acciones prácticas incluyen coordinarse con los responsables de voluntariado de Fedasil para alinear las habilidades del personal con las necesidades de los centros, organizar jornadas de voluntariado en grupo y apoyar campañas de recaudación para materiales educativos y proyectos de inclusión digital.
Ruth de Ruijter, coordinadora de voluntarios de Fedasil, señaló que los centros dependen de un grupo central de colaboradores de larga trayectoria, pero que necesitan constantemente nuevos reclutas, ya que el entusiasmo disminuye con el tiempo. Las campañas de reclutamiento ahora utilizan plataformas como ‘Give a Day’ y vrijwilligerswerk.be, y durante diciembre se llevarán a cabo campañas en redes sociales. Fedasil invita a los belgas a comprometerse con tan solo una mañana a la semana, enfatizando que “no se requieren habilidades especiales, solo paciencia y una actitud abierta”.
La red de acogida de Bélgica opera a una capacidad récord —más de 36.000 plazas— pero aún deja a unos 2.600 hombres solos en lista de espera. Por ello, los voluntarios juegan un papel crucial para garantizar un nivel mínimo de vida y para crear vínculos entre los centros y las comunidades locales. Su presencia también reduce riesgos reputacionales para empleadores y municipios que acogen a grandes poblaciones migrantes, promoviendo una integración más fluida y disminuyendo la probabilidad de tensiones sociales.
Para los gestores de movilidad global, las oportunidades de colaboración con Fedasil pueden formar parte de una estrategia de responsabilidad social corporativa, además de ofrecer beneficios prácticos: programas de mentoría, tutorías de idiomas o patrocinio de eventos deportivos y culturales pueden acelerar la integración de los familiares de los empleados y generar buena voluntad con las autoridades locales que gestionan permisos de trabajo y residencia.
Se anima a las multinacionales a difundir internamente la convocatoria de voluntariado y a explorar políticas de permiso remunerado para voluntariado, que pueden mejorar el compromiso de los empleados y fortalecer la reputación corporativa en el competitivo mercado laboral belga. Las acciones prácticas incluyen coordinarse con los responsables de voluntariado de Fedasil para alinear las habilidades del personal con las necesidades de los centros, organizar jornadas de voluntariado en grupo y apoyar campañas de recaudación para materiales educativos y proyectos de inclusión digital.








