
El Secretario de Estado Marco Rubio anunció el 3 de diciembre nuevas restricciones de visa para individuos nigerianos “responsables o cómplices de actos graves de violencia contra cristianos y otras minorías religiosas.” La política, emitida bajo la sección INA §212(a)(3)(C), bloquea la entrada a Estados Unidos de las personas nombradas y sus familiares directos, y permite a los oficiales consulares revocar visas ya emitidas.
El anuncio se produce tras una ola de ataques mortales en los estados de Plateau y Kaduna, atribuidos a milicias fulani y al Estado Islámico en África Occidental. Washington afirma que Abuja no ha procesado a los responsables ni ha protegido los lugares de culto. Aunque el Departamento de Estado no divulgó nombres, grupos de derechos humanos esperan que esta semana se envíen a las embajadas estadounidenses listas con políticos regionales, comandantes de fuerzas de seguridad y líderes de milicias.
Para las empresas estadounidenses que envían personal a Nigeria, especialmente en sectores de energía, infraestructura y agronegocios, el impacto inmediato es limitado, pero la medida subraya la creciente disposición de EE.UU. a usar herramientas migratorias para promover objetivos de derechos humanos. Los equipos de movilidad deben estar atentos a empleados que compartan apellidos con personas sancionadas, lo que podría activar controles adicionales.
Las nuevas sanciones coinciden con la orden del presidente Trump al Pentágono para elaborar planes de contingencia para una “intervención humanitaria” en Nigeria, elevando las tensiones geopolíticas. Funcionarios nigerianos calificaron las prohibiciones de visa como “poco útiles”, argumentando que la violencia se debe a la delincuencia y conflictos pastoriles causados por el cambio climático, más que a persecución religiosa.
Consejo práctico: Espere controles de seguridad más largos para todos los solicitantes de visa nigerianos en las próximas semanas. Los empleadores deben considerar tiempos adicionales para la asignación de personal y aconsejar a sus empleados llevar cartas de invitación detalladas y pruebas claras del motivo del viaje.
El anuncio se produce tras una ola de ataques mortales en los estados de Plateau y Kaduna, atribuidos a milicias fulani y al Estado Islámico en África Occidental. Washington afirma que Abuja no ha procesado a los responsables ni ha protegido los lugares de culto. Aunque el Departamento de Estado no divulgó nombres, grupos de derechos humanos esperan que esta semana se envíen a las embajadas estadounidenses listas con políticos regionales, comandantes de fuerzas de seguridad y líderes de milicias.
Para las empresas estadounidenses que envían personal a Nigeria, especialmente en sectores de energía, infraestructura y agronegocios, el impacto inmediato es limitado, pero la medida subraya la creciente disposición de EE.UU. a usar herramientas migratorias para promover objetivos de derechos humanos. Los equipos de movilidad deben estar atentos a empleados que compartan apellidos con personas sancionadas, lo que podría activar controles adicionales.
Las nuevas sanciones coinciden con la orden del presidente Trump al Pentágono para elaborar planes de contingencia para una “intervención humanitaria” en Nigeria, elevando las tensiones geopolíticas. Funcionarios nigerianos calificaron las prohibiciones de visa como “poco útiles”, argumentando que la violencia se debe a la delincuencia y conflictos pastoriles causados por el cambio climático, más que a persecución religiosa.
Consejo práctico: Espere controles de seguridad más largos para todos los solicitantes de visa nigerianos en las próximas semanas. Los empleadores deben considerar tiempos adicionales para la asignación de personal y aconsejar a sus empleados llevar cartas de invitación detalladas y pruebas claras del motivo del viaje.









