
Polonia ha eliminado oficialmente a Georgia de la lista de países cuyos ciudadanos pueden acceder al régimen acelerado de “declaración del empleador”, poniendo fin a un acuerdo de 15 años que permitía a los georgianos trabajar en Polonia hasta por dos años con solo una simple y económica declaración presentada por su posible empleador. El cambio fue confirmado por VisaHQ el 2 de diciembre, aunque proviene de una regulación firmada el 21 de noviembre y que entrará en vigor el 1 de diciembre de 2025.
Solo Armenia, Bielorrusia, Moldavia y Ucrania permanecen ahora en la lista. Los ciudadanos georgianos que ya tengan una declaración válida o una visa nacional polaca podrán seguir trabajando hasta que esos documentos expiren, pero todos los nuevos contratados deberán obtener una visa de trabajo tipo D y, en muchos casos, un permiso de trabajo estándar. Las agencias de reclutamiento estiman que los tiempos de procesamiento para contrataciones georgianas se alargarán de tres días a entre seis y ocho semanas.
Varsovia adelantó esta medida en agosto, en medio de discusiones en la UE sobre la posible suspensión del régimen de exención de visa para Georgia, debido a preocupaciones por estancias irregulares. Los datos del mercado laboral también muestran una caída del 30 % en la demanda de trabajadores georgianos en comparación con el año anterior, mientras que la oferta laboral ucraniana y moldava sigue siendo abundante.
Los empleadores en horticultura y logística advierten sobre posibles vacíos a corto plazo: la preparación de invernaderos en primavera suele depender del personal estacional georgiano. Las multinacionales con programas de rotación deberán actualizar sus políticas de movilidad y alertar a los técnicos georgianos que cambian frecuentemente de lugar de trabajo, ya que ahora se requerirá un permiso para cada traslado.
Solo Armenia, Bielorrusia, Moldavia y Ucrania permanecen ahora en la lista. Los ciudadanos georgianos que ya tengan una declaración válida o una visa nacional polaca podrán seguir trabajando hasta que esos documentos expiren, pero todos los nuevos contratados deberán obtener una visa de trabajo tipo D y, en muchos casos, un permiso de trabajo estándar. Las agencias de reclutamiento estiman que los tiempos de procesamiento para contrataciones georgianas se alargarán de tres días a entre seis y ocho semanas.
Varsovia adelantó esta medida en agosto, en medio de discusiones en la UE sobre la posible suspensión del régimen de exención de visa para Georgia, debido a preocupaciones por estancias irregulares. Los datos del mercado laboral también muestran una caída del 30 % en la demanda de trabajadores georgianos en comparación con el año anterior, mientras que la oferta laboral ucraniana y moldava sigue siendo abundante.
Los empleadores en horticultura y logística advierten sobre posibles vacíos a corto plazo: la preparación de invernaderos en primavera suele depender del personal estacional georgiano. Las multinacionales con programas de rotación deberán actualizar sus políticas de movilidad y alertar a los técnicos georgianos que cambian frecuentemente de lugar de trabajo, ya que ahora se requerirá un permiso para cada traslado.









