
El ministro de Justicia, Jim O’Callaghan, ha presentado un paquete de rescate de 12 millones de euros diseñado para reducir los tiempos de decisión en primera instancia de solicitudes de asilo, pasando del promedio actual de 18 meses a “no más de seis meses” para junio de 2026. Anunciado el 30 de noviembre y confirmado el 1 de diciembre, el plan financia 120 nuevos trabajadores de casos, un panel de intérpretes, una mayor capacidad de asistencia legal y una nueva plataforma digital de gestión de casos con paneles públicos mensuales.
Los empleadores recibieron con agrado la medida, ya que los solicitantes de protección internacional obtienen acceso al mercado laboral tras seis meses según las normas de la UE. Por tanto, una tramitación más rápida acelera las vías hacia permisos de trabajo y reunificación familiar, lo que podría aliviar la escasez de mano de obra en sectores como la hostelería, la logística y la agroalimentación, donde las carencias de personal superan el 10%. La Confederación de Empresas e Industriales de Irlanda (IBEC) afirmó que acelerar las decisiones “amplía el talento nacional y reduce la dependencia de mano de obra temporal costosa”.
El componente tecnológico automatizará la carga de documentos, la verificación biométrica y la programación de entrevistas, siguiendo las mejores prácticas de Canadá y Países Bajos. La transparencia en el seguimiento de casos también ayudará a las ONG humanitarias a supervisar los plazos y a reducir litigios por demoras.
Para los gestores de movilidad, la conclusión clave es que algunos solicitantes de protección que lleguen en el primer trimestre de 2026 podrían recibir decisiones —y acceso al mercado laboral— en el mismo trimestre. Las empresas deben prepararse para integrar a estos candidatos recién elegibles en los marcos existentes de Permisos de Habilidades Críticas y Permisos Generales de Empleo.
Sin embargo, el Consejo Irlandés para los Refugiados advierte que la rapidez en las decisiones no debe comprometer la justicia. Solicita una auditoría independiente tras el primer año para garantizar que se mantenga la calidad. El Parlamento votará la asignación presupuestaria suplementaria la próxima semana; se espera una aprobación rápida debido a la presión multipartidista para resolver los retrasos en alojamientos.
Los empleadores recibieron con agrado la medida, ya que los solicitantes de protección internacional obtienen acceso al mercado laboral tras seis meses según las normas de la UE. Por tanto, una tramitación más rápida acelera las vías hacia permisos de trabajo y reunificación familiar, lo que podría aliviar la escasez de mano de obra en sectores como la hostelería, la logística y la agroalimentación, donde las carencias de personal superan el 10%. La Confederación de Empresas e Industriales de Irlanda (IBEC) afirmó que acelerar las decisiones “amplía el talento nacional y reduce la dependencia de mano de obra temporal costosa”.
El componente tecnológico automatizará la carga de documentos, la verificación biométrica y la programación de entrevistas, siguiendo las mejores prácticas de Canadá y Países Bajos. La transparencia en el seguimiento de casos también ayudará a las ONG humanitarias a supervisar los plazos y a reducir litigios por demoras.
Para los gestores de movilidad, la conclusión clave es que algunos solicitantes de protección que lleguen en el primer trimestre de 2026 podrían recibir decisiones —y acceso al mercado laboral— en el mismo trimestre. Las empresas deben prepararse para integrar a estos candidatos recién elegibles en los marcos existentes de Permisos de Habilidades Críticas y Permisos Generales de Empleo.
Sin embargo, el Consejo Irlandés para los Refugiados advierte que la rapidez en las decisiones no debe comprometer la justicia. Solicita una auditoría independiente tras el primer año para garantizar que se mantenga la calidad. El Parlamento votará la asignación presupuestaria suplementaria la próxima semana; se espera una aprobación rápida debido a la presión multipartidista para resolver los retrasos en alojamientos.










