
Finnair confirmó en la madrugada del 1 de diciembre que sus equipos de ingeniería habían terminado de instalar parches de emergencia en 12 aviones de la familia Airbus A320, cumpliendo por poco el plazo de 24 horas impuesto por la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA). La directiva revertía una reciente actualización del sistema de control de vuelo tras la advertencia de Airbus sobre un posible riesgo de corrupción de datos bajo condiciones de intensa radiación solar.
Trabajando toda la noche en Helsinki, tres turnos de mantenimiento completaron las actualizaciones sin necesidad de dejar los aviones fuera de servicio por largos periodos, limitando el impacto en los pasajeros a unos pocos retrasos de 45 minutos en salidas del viernes por la noche. Con el parche aplicado, el programa de vuelos del sábado de Finnair se desarrolló con normalidad, aunque la aerolínea mantuvo un avión de fuselaje estrecho en reserva y monitoreará la telemetría durante 48 horas.
Para los gestores de movilidad, este incidente es un recordatorio oportuno de cómo las directivas técnicas de aeronavegabilidad pueden provocar repentinamente faltantes de capacidad. Más de 6,000 A320 en todo el mundo se vieron afectados, y varias aerolíneas asiáticas y latinoamericanas tuvieron que dejar sus aviones en tierra temporalmente, causando interrupciones en las conexiones para expatriados finlandeses que viajaban a sitios de proyectos a través de aerolíneas asociadas.
La rápida respuesta de Finnair subraya los beneficios de resiliencia que ofrece contar con una unidad de mantenimiento interna certificada bajo la Parte-145, ubicada junto a su hub principal, un factor que los especialistas en reubicación podrían considerar al elegir aerolíneas preferidas en rutas críticas. Se recomienda a las empresas verificar que otras aerolíneas en sus programas de viaje también hayan cumplido con la reversión del software para evitar interrupciones de último momento.
Trabajando toda la noche en Helsinki, tres turnos de mantenimiento completaron las actualizaciones sin necesidad de dejar los aviones fuera de servicio por largos periodos, limitando el impacto en los pasajeros a unos pocos retrasos de 45 minutos en salidas del viernes por la noche. Con el parche aplicado, el programa de vuelos del sábado de Finnair se desarrolló con normalidad, aunque la aerolínea mantuvo un avión de fuselaje estrecho en reserva y monitoreará la telemetría durante 48 horas.
Para los gestores de movilidad, este incidente es un recordatorio oportuno de cómo las directivas técnicas de aeronavegabilidad pueden provocar repentinamente faltantes de capacidad. Más de 6,000 A320 en todo el mundo se vieron afectados, y varias aerolíneas asiáticas y latinoamericanas tuvieron que dejar sus aviones en tierra temporalmente, causando interrupciones en las conexiones para expatriados finlandeses que viajaban a sitios de proyectos a través de aerolíneas asociadas.
La rápida respuesta de Finnair subraya los beneficios de resiliencia que ofrece contar con una unidad de mantenimiento interna certificada bajo la Parte-145, ubicada junto a su hub principal, un factor que los especialistas en reubicación podrían considerar al elegir aerolíneas preferidas en rutas críticas. Se recomienda a las empresas verificar que otras aerolíneas en sus programas de viaje también hayan cumplido con la reversión del software para evitar interrupciones de último momento.








