
Chipre ha firmado un contrato de Obligación de Servicio Público (OSP) por un año con Aegean Airlines que restablece los vuelos directos entre Lárnaca y Bruselas desde el 1 de diciembre de 2025 hasta el 30 de noviembre de 2026. El acuerdo garantiza al menos tres vuelos semanales, aumentando a cinco durante la presidencia de la UE de la isla, y fija el precio máximo de los billetes en clase económica totalmente flexible en 400 €, incluyendo una maleta de 23 kg y comida a bordo.
Este convenio pone fin a una década de conectividad irregular que obligaba a funcionarios y viajeros de negocios a hacer escala en Atenas, Viena o Londres. El ministro de Transporte, Alexis Vafeades, calificó esta conexión como “esencial” para la logística de la presidencia, destacando que el gobierno deberá trasladar a cientos de delegados a las instituciones europeas cada semana. La Cámara de Comercio de Chipre estima que la ruta inyectará al menos 35 millones de euros en la economía a través de congresos, turismo MICE y carga de exportación.
Dentro del marco de la OSP —similar a los esquemas usados en Malta y Luxemburgo— Aegean operará con Airbus A320neo de 174 asientos, equipados con Wi-Fi Ku-band y una capacidad de carga en bodega de 15 toneladas, una ventaja para el transporte de productos perecederos y farmacéuticos sensibles al tiempo. La venta de billetes comenzó pocas horas después de la firma; el vuelo inaugural ya está al 60 % de ocupación, lo que indica una demanda acumulada entre diplomáticos y lobbistas.
Para las empresas, este servicio directo ofrece tiempos de viaje puerta a puerta más cortos y presupuestos de viaje más predecibles en un momento en que los precios de alojamiento en Bruselas suelen dispararse. Se recomienda a los gestores de movilidad reservar bloques de asientos con antelación y comunicar a los empleados el límite de tarifa de 400 €, que solo aplica a billetes totalmente flexibles.
Las autoridades sugirieron que acuerdos similares podrían respaldar conexiones con Frankfurt y París, diversificando aún más la recuperación aérea de Chipre tras la pandemia. Los observadores estarán atentos a si la ruta a Bruselas cumple con los objetivos de ocupación que justifiquen su extensión más allá de 2026.
Este convenio pone fin a una década de conectividad irregular que obligaba a funcionarios y viajeros de negocios a hacer escala en Atenas, Viena o Londres. El ministro de Transporte, Alexis Vafeades, calificó esta conexión como “esencial” para la logística de la presidencia, destacando que el gobierno deberá trasladar a cientos de delegados a las instituciones europeas cada semana. La Cámara de Comercio de Chipre estima que la ruta inyectará al menos 35 millones de euros en la economía a través de congresos, turismo MICE y carga de exportación.
Dentro del marco de la OSP —similar a los esquemas usados en Malta y Luxemburgo— Aegean operará con Airbus A320neo de 174 asientos, equipados con Wi-Fi Ku-band y una capacidad de carga en bodega de 15 toneladas, una ventaja para el transporte de productos perecederos y farmacéuticos sensibles al tiempo. La venta de billetes comenzó pocas horas después de la firma; el vuelo inaugural ya está al 60 % de ocupación, lo que indica una demanda acumulada entre diplomáticos y lobbistas.
Para las empresas, este servicio directo ofrece tiempos de viaje puerta a puerta más cortos y presupuestos de viaje más predecibles en un momento en que los precios de alojamiento en Bruselas suelen dispararse. Se recomienda a los gestores de movilidad reservar bloques de asientos con antelación y comunicar a los empleados el límite de tarifa de 400 €, que solo aplica a billetes totalmente flexibles.
Las autoridades sugirieron que acuerdos similares podrían respaldar conexiones con Frankfurt y París, diversificando aún más la recuperación aérea de Chipre tras la pandemia. Los observadores estarán atentos a si la ruta a Bruselas cumple con los objetivos de ocupación que justifiquen su extensión más allá de 2026.










