
El portal de migración de la Comisión Europea, actualizado el 29 de noviembre, confirma que Italia mantendrá los controles temporales en su frontera terrestre con Eslovenia desde el 19 de diciembre de 2025 hasta el 18 de junio de 2026. Roma reinstauró estos controles en diciembre de 2024, citando “riesgos de seguridad elevados vinculados a la migración irregular a lo largo de la ruta de los Balcanes Occidentales” y preocupaciones sobre una posible infiltración terrorista durante el próximo Jubileo Universal 2026 y los Juegos Olímpicos de Invierno.
Según el artículo 25 del Código de Fronteras Schengen, los estados miembros pueden reintroducir temporalmente controles en las fronteras internas por períodos renovables de seis meses cuando se identifiquen amenazas graves para el orden público o la seguridad interna. La notificación de Italia —su cuarta prórroga consecutiva— implica que los viajeros en coche o tren entre Trieste/Gorizia y Nova Gorica/Koper deben seguir portando pasaportes o documentos nacionales de identidad y esperar inspecciones policiales aleatorias.
Para las empresas, el impacto se traduce principalmente en tiempo y previsibilidad: los operadores de transporte de mercancías han reportado retrasos promedio de 15 a 20 minutos en puntos secundarios de cruce, mientras que los trabajadores transfronterizos enfrentan controles puntuales durante las horas pico matutinas. Se recomienda a las compañías con empleados que viajan desde Eslovenia a la región italiana de Friuli-Venecia Julia emitir cartas laborales (en italiano y esloveno) que confirmen la necesidad del desplazamiento, una práctica que ha facilitado las inspecciones durante el último año.
Los organizadores de eventos para la temporada de esquí 2025-26 en los Alpes Julianos y para los Juegos de Milán-Cortina deben tener en cuenta estos controles en los horarios de traslado, especialmente para los traslados VIP y de medios que pasen por el aeropuerto de Liubliana. La Comisión señala que cualquier extensión más allá de junio de 2026 requerirá una nueva justificación y consulta con los países vecinos, un dato clave para los planificadores corporativos que organizan asignaciones a largo plazo.
Los viajeros que entren a Italia desde Eslovenia por aire o mar no se ven afectados; las normas Schengen siguen vigentes en esas fronteras. Sin embargo, el Ministerio del Interior italiano ha advertido que los controles aleatorios podrían ampliarse a los servicios ferroviarios si las evaluaciones de inteligencia lo justifican. Los responsables de movilidad deben estar atentos a los boletines oficiales y asegurarse de que los empleados porten la documentación requerida en todo momento.
Según el artículo 25 del Código de Fronteras Schengen, los estados miembros pueden reintroducir temporalmente controles en las fronteras internas por períodos renovables de seis meses cuando se identifiquen amenazas graves para el orden público o la seguridad interna. La notificación de Italia —su cuarta prórroga consecutiva— implica que los viajeros en coche o tren entre Trieste/Gorizia y Nova Gorica/Koper deben seguir portando pasaportes o documentos nacionales de identidad y esperar inspecciones policiales aleatorias.
Para las empresas, el impacto se traduce principalmente en tiempo y previsibilidad: los operadores de transporte de mercancías han reportado retrasos promedio de 15 a 20 minutos en puntos secundarios de cruce, mientras que los trabajadores transfronterizos enfrentan controles puntuales durante las horas pico matutinas. Se recomienda a las compañías con empleados que viajan desde Eslovenia a la región italiana de Friuli-Venecia Julia emitir cartas laborales (en italiano y esloveno) que confirmen la necesidad del desplazamiento, una práctica que ha facilitado las inspecciones durante el último año.
Los organizadores de eventos para la temporada de esquí 2025-26 en los Alpes Julianos y para los Juegos de Milán-Cortina deben tener en cuenta estos controles en los horarios de traslado, especialmente para los traslados VIP y de medios que pasen por el aeropuerto de Liubliana. La Comisión señala que cualquier extensión más allá de junio de 2026 requerirá una nueva justificación y consulta con los países vecinos, un dato clave para los planificadores corporativos que organizan asignaciones a largo plazo.
Los viajeros que entren a Italia desde Eslovenia por aire o mar no se ven afectados; las normas Schengen siguen vigentes en esas fronteras. Sin embargo, el Ministerio del Interior italiano ha advertido que los controles aleatorios podrían ampliarse a los servicios ferroviarios si las evaluaciones de inteligencia lo justifican. Los responsables de movilidad deben estar atentos a los boletines oficiales y asegurarse de que los empleados porten la documentación requerida en todo momento.








