
La aerolínea kazaja SCAT Airlines lanzará en marzo de 2026 un servicio dos veces por semana con Boeing 737-MAX 9 entre Praga y Sanya, Hainan, confirmó la compañía el 26 de noviembre. Aunque la ruta comienza el próximo año, el anuncio ya está influyendo en la planificación de viajes corporativos y presupuestos para 2026.
Actualmente, la mayoría de los pasajeros y la carga valiosa entre Chequia y el sur de China viajan por Almaty, Estambul o Dubái. El nuevo vuelo directo reduce el tiempo de viaje hasta en cinco horas en cada trayecto y, lo más importante, evita los requisitos de visado de tránsito en China continental que han dejado a viajeros atrapados en largas colas desde que Pekín reinstauró los controles a principios de este año.
Para los exportadores checos, las ventajas son claras. Los proveedores de automoción y electrónica con fábricas en Guangdong suelen necesitar enviar moldes y repuestos urgentes; la asignación de tres toneladas de carga por vuelo de SCAT debería aliviar los cuellos de botella actuales. Los operadores turísticos también celebran la conexión, anticipando que los resorts de playa de Sanya atraerán a grupos de incentivos checos que buscan una alternativa invernal a Phuket y las Islas Canarias.
Desde el punto de vista de movilidad y cumplimiento, las empresas deben recordar que Hainan ofrece un régimen de visado a la llegada de 30 días para muchos ciudadanos de la UE, incluidos los checos. Sin embargo, el personal que conecte hacia el continente necesitará el visado chino correspondiente. Los gestores de viajes deben actualizar los procesos de aprobación de viajes para reflejar estas nuevas opciones una vez que los horarios se carguen en los GDS en enero.
El Aeropuerto de Praga, que gestionó un récord de 14 millones de pasajeros en 2024, señala que esta ruta refuerza su estrategia de atraer aerolíneas fuera de la UE para diversificar la capacidad de largo recorrido tras el colapso de la red asiática de Czech Airlines durante la pandemia.
Actualmente, la mayoría de los pasajeros y la carga valiosa entre Chequia y el sur de China viajan por Almaty, Estambul o Dubái. El nuevo vuelo directo reduce el tiempo de viaje hasta en cinco horas en cada trayecto y, lo más importante, evita los requisitos de visado de tránsito en China continental que han dejado a viajeros atrapados en largas colas desde que Pekín reinstauró los controles a principios de este año.
Para los exportadores checos, las ventajas son claras. Los proveedores de automoción y electrónica con fábricas en Guangdong suelen necesitar enviar moldes y repuestos urgentes; la asignación de tres toneladas de carga por vuelo de SCAT debería aliviar los cuellos de botella actuales. Los operadores turísticos también celebran la conexión, anticipando que los resorts de playa de Sanya atraerán a grupos de incentivos checos que buscan una alternativa invernal a Phuket y las Islas Canarias.
Desde el punto de vista de movilidad y cumplimiento, las empresas deben recordar que Hainan ofrece un régimen de visado a la llegada de 30 días para muchos ciudadanos de la UE, incluidos los checos. Sin embargo, el personal que conecte hacia el continente necesitará el visado chino correspondiente. Los gestores de viajes deben actualizar los procesos de aprobación de viajes para reflejar estas nuevas opciones una vez que los horarios se carguen en los GDS en enero.
El Aeropuerto de Praga, que gestionó un récord de 14 millones de pasajeros en 2024, señala que esta ruta refuerza su estrategia de atraer aerolíneas fuera de la UE para diversificar la capacidad de largo recorrido tras el colapso de la red asiática de Czech Airlines durante la pandemia.











