
Los servicios de Eurostar sufrieron retrasos en cadena el domingo 23 de noviembre tras una serie de problemas técnicos en la estación de París Gare du Nord, que redujeron la capacidad de las plataformas durante nueve horas. Los trenes procedentes de Bruselas y Londres perdieron sus franjas horarias, lo que obligó a que las salidas posteriores hicieran cola fuera de la estación, generando retrasos en cadena en Bélgica y los Países Bajos.
Se publicaron seis avisos de retraso entre las 10:00 y las 19:00, con algunos servicios demorados hasta 40 minutos. Los viajeros de negocios reportaron reuniones perdidas, mientras que los responsables de movilidad se apresuraron a reubicar a los ejecutivos en trenes posteriores o vuelos de corta distancia. Aunque las normas de compensación de Eurostar se aplican tras un retraso de 60 minutos, las empresas suelen asumir la carga administrativa.
El incidente pone de manifiesto las vulnerabilidades estructurales del centro ferroviario internacional más concurrido de Europa: a diferencia de Londres St Pancras, que cuenta con cuatro vías de paso, Gare du Nord depende de vías muertas que obligan a los trenes a retroceder para salir. Por ello, una sola falla puede colapsar toda la entrada de la estación.
Eurostar advierte que la presión aumentará con la huelga de tres días convocada por los sindicatos ferroviarios belgas a partir del 24 de noviembre. Se recomienda a los equipos de movilidad incluir márgenes adicionales en los itinerarios, añadir fuentes de información ferroviaria en tiempo real a los paneles de control de cuidado del viajero y presupuestar estancias hoteleras de última hora en caso de que los planes ferroviarios se desmoronen.
Se publicaron seis avisos de retraso entre las 10:00 y las 19:00, con algunos servicios demorados hasta 40 minutos. Los viajeros de negocios reportaron reuniones perdidas, mientras que los responsables de movilidad se apresuraron a reubicar a los ejecutivos en trenes posteriores o vuelos de corta distancia. Aunque las normas de compensación de Eurostar se aplican tras un retraso de 60 minutos, las empresas suelen asumir la carga administrativa.
El incidente pone de manifiesto las vulnerabilidades estructurales del centro ferroviario internacional más concurrido de Europa: a diferencia de Londres St Pancras, que cuenta con cuatro vías de paso, Gare du Nord depende de vías muertas que obligan a los trenes a retroceder para salir. Por ello, una sola falla puede colapsar toda la entrada de la estación.
Eurostar advierte que la presión aumentará con la huelga de tres días convocada por los sindicatos ferroviarios belgas a partir del 24 de noviembre. Se recomienda a los equipos de movilidad incluir márgenes adicionales en los itinerarios, añadir fuentes de información ferroviaria en tiempo real a los paneles de control de cuidado del viajero y presupuestar estancias hoteleras de última hora en caso de que los planes ferroviarios se desmoronen.







