
La Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) de Irlanda del Norte ha acusado a un hombre afgano de 25 años, Abad Ulla Alimi, de facilitar la inmigración ilegal tras llegar a Belfast en tren desde Dublín junto a otros cuatro ciudadanos afganos — dos adultos y dos niños — el 19 de noviembre. Los investigadores creen que el grupo entró en Irlanda a través de Francia y estaba intentando llegar a Inglaterra mediante el Área Común de Viaje.
El arresto pone de manifiesto el creciente uso del “puente terrestre” entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte por parte de facilitadores que buscan eludir los controles fronterizos del Reino Unido en puertos y aeropuertos. El comandante de la sucursal de Belfast de la NCA, David Cunningham, afirmó que la agencia tiene más de 100 investigaciones activas sobre redes similares.
Para los gestores de movilidad internacional, el caso es un recordatorio de que los trabajadores legítimos que viajan entre Dublín y Belfast deben portar documentos de identidad, aunque no haya controles rutinarios en el Área Común de Viaje. Las autoridades del Reino Unido han intensificado las inspecciones aleatorias en rutas ferroviarias y de autobús transfronterizas, lo que ha provocado retrasos ocasionales. Se recomienda a los empleadores informar a sus empleados sobre posibles interrogatorios y mantener a mano pruebas del derecho a trabajar.
El sospechoso ha quedado en prisión preventiva hasta el 19 de diciembre. Si es condenado, podría enfrentar hasta 14 años de cárcel. La familia afgana ha sido entregada a los oficiales de inmigración para el proceso de solicitud de asilo, según documentos judiciales.
El arresto pone de manifiesto el creciente uso del “puente terrestre” entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte por parte de facilitadores que buscan eludir los controles fronterizos del Reino Unido en puertos y aeropuertos. El comandante de la sucursal de Belfast de la NCA, David Cunningham, afirmó que la agencia tiene más de 100 investigaciones activas sobre redes similares.
Para los gestores de movilidad internacional, el caso es un recordatorio de que los trabajadores legítimos que viajan entre Dublín y Belfast deben portar documentos de identidad, aunque no haya controles rutinarios en el Área Común de Viaje. Las autoridades del Reino Unido han intensificado las inspecciones aleatorias en rutas ferroviarias y de autobús transfronterizas, lo que ha provocado retrasos ocasionales. Se recomienda a los empleadores informar a sus empleados sobre posibles interrogatorios y mantener a mano pruebas del derecho a trabajar.
El sospechoso ha quedado en prisión preventiva hasta el 19 de diciembre. Si es condenado, podría enfrentar hasta 14 años de cárcel. La familia afgana ha sido entregada a los oficiales de inmigración para el proceso de solicitud de asilo, según documentos judiciales.









