
El Aeropuerto de Bruselas Sur Charleroi (BSCA) suspenderá sus operaciones de pasajeros el miércoles 26 de noviembre debido a la adhesión del personal a la huelga nacional de tres días en Bélgica. Este centro regional, muy utilizado por aerolíneas de bajo costo y vuelos chárter corporativos, confirmó que no se gestionarán ni salidas ni llegadas, citando falta de seguridad y capacidad de manejo en tierra para garantizar operaciones seguras.
Las aerolíneas ya han comenzado a contactar a los pasajeros afectados; solo Ryanair debe reprogramar o reembolsar cerca de 20,000 asientos. Las agencias de gestión de viajes advierten que redirigir vuelos vía Maastricht o Lille puede ser inviable, ya que los servicios ferroviarios también se verán reducidos durante los días de huelga. Los operadores logísticos en la zona de carga vecina anticipan retrasos en envíos sensibles de ciencias de la vida que normalmente transitan por la instalación de cadena de frío dedicada del BSCA.
El cierre tendrá un efecto dominó en el sistema de transporte belga. El Aeropuerto de Bruselas, a 60 km al norte, ya canceló todos los vuelos de salida ese mismo día, aumentando la probabilidad de saturación de pasajeros cuando se reanuden los servicios. Se espera que el acceso por carretera a Charleroi se vea dificultado por piquetes, y las empresas de alquiler de coches han anunciado la exención de cargos por “no presentación”.
Para las empresas con empleados expatriados que viajen para reuniones de fin de año, el consejo es claro: evitar itinerarios que pasen por Bélgica entre el 24 y el 27 de noviembre, prever días adicionales de viaje y asegurarse de que el seguro cubra interrupciones por huelga. También se recomienda preparar extensiones de cumplimiento migratorio en caso de que titulares de permisos de residencia sufran estancias prolongadas por cancelaciones de vuelos.
Las aerolíneas ya han comenzado a contactar a los pasajeros afectados; solo Ryanair debe reprogramar o reembolsar cerca de 20,000 asientos. Las agencias de gestión de viajes advierten que redirigir vuelos vía Maastricht o Lille puede ser inviable, ya que los servicios ferroviarios también se verán reducidos durante los días de huelga. Los operadores logísticos en la zona de carga vecina anticipan retrasos en envíos sensibles de ciencias de la vida que normalmente transitan por la instalación de cadena de frío dedicada del BSCA.
El cierre tendrá un efecto dominó en el sistema de transporte belga. El Aeropuerto de Bruselas, a 60 km al norte, ya canceló todos los vuelos de salida ese mismo día, aumentando la probabilidad de saturación de pasajeros cuando se reanuden los servicios. Se espera que el acceso por carretera a Charleroi se vea dificultado por piquetes, y las empresas de alquiler de coches han anunciado la exención de cargos por “no presentación”.
Para las empresas con empleados expatriados que viajen para reuniones de fin de año, el consejo es claro: evitar itinerarios que pasen por Bélgica entre el 24 y el 27 de noviembre, prever días adicionales de viaje y asegurarse de que el seguro cubra interrupciones por huelga. También se recomienda preparar extensiones de cumplimiento migratorio en caso de que titulares de permisos de residencia sufran estancias prolongadas por cancelaciones de vuelos.









