
La Asamblea Federal bicameral de Suiza ha aprobado la primera gran reforma en más de una década de la Ley Federal sobre Extranjeros e Integración. En una sesión maratónica que concluyó en las primeras horas del 21 de noviembre de 2025, los legisladores aprobaron un paquete que (1) establece límites numéricos anuales para varias categorías de trabajadores procedentes de terceros países, (2) obliga a realizar controles biométricos sistemáticos en todas las fronteras terrestres, y (3) reduce los plazos legales para tramitar solicitudes de asilo de 140 a 90 días.
Contexto y motivaciones políticas: 2025 ha registrado la mayor inmigración neta hacia Suiza desde la crisis financiera de 2007-08, impulsada por la escasez de mano de obra en sectores como la salud, la construcción y las tecnologías de la información. Al mismo tiempo, las llegadas irregulares por la llamada “ruta balcánica” han aumentado considerablemente, generando presión por parte de las autoridades cantonales, que asumen los costos de alojamiento y asistencia social. Los partidos de centro-derecha sostienen que la credibilidad de la tradición humanitaria suiza depende de demostrar simultáneamente un control efectivo sobre quién puede establecerse y trabajar en el país.
Medidas clave y su funcionamiento:
• En 2026 se otorgarán 35,000 permisos para trabajadores altamente cualificados de terceros países (frente a un régimen previo sin límite).
• El nuevo “test de mercado laboral plus” exige a los empleadores demostrar no solo que no hay candidatos adecuados en Suiza o la UE/AELC, sino también que han implementado planes de reciclaje profesional para el personal local.
• El Comando de la Guardia Fronteriza (parte de la Oficina Suiza de Aduanas y Seguridad Fronteriza) recibirá 120 millones de francos suizos para instalar estaciones biométricas fijas en 11 pasos secundarios por carretera con Italia y Francia, complementando los controles EES en aeropuertos.
• Asilo acelerado: procedimientos simplificados para nacionales de cinco países “manifiestamente seguros” y presentación digital exclusiva para reducir la burocracia.
Implicaciones para las empresas: Los empleadores multinacionales deberán reservar las cuotas con mucha antelación y aportar pruebas más sólidas de sus esfuerzos de reclutamiento. En la práctica, las grandes empresas podrían trasladar algunos puestos a centros cercanos en la UE, mientras que las pymes, especialmente en farmacéutica y manufactura avanzada, enfrentarán plazos más largos para incorporar especialistas. Los equipos de movilidad global deberán ajustar los cronogramas de proyectos, actualizar las proyecciones de costos (honorarios legales, auditorías de cumplimiento) y revisar las estrategias de captación de talento.
Reacción de los actores involucrados: Economiesuisse advirtió que las cuotas rígidas podrían afectar la competitividad de Suiza, señalando que el 46 % del personal de I+D en ciencias de la vida no es suizo. Los sindicatos recibieron con cautela los tests laborales más estrictos, pero criticaron la falta de inspectores adicionales para combatir el dumping salarial. ONG como el Consejo Suizo para Refugiados temen que la aceleración de los procedimientos de asilo pueda poner en riesgo las garantías del debido proceso. El Consejo Federal prometió una primera evaluación de impacto para mediados de 2027.
Próximos pasos: La nueva ley entrará en vigor el 1 de enero de 2026, con las ordenanzas de aplicación previstas para la primera semana de diciembre. Las empresas deben estar atentas a las directrices cantonales, especialmente en Zúrich, Basilea y Vaud, que juntos emiten más de la mitad de todos los permisos de trabajo, para ajustar calendarios de solicitud y plantillas de documentación.
Contexto y motivaciones políticas: 2025 ha registrado la mayor inmigración neta hacia Suiza desde la crisis financiera de 2007-08, impulsada por la escasez de mano de obra en sectores como la salud, la construcción y las tecnologías de la información. Al mismo tiempo, las llegadas irregulares por la llamada “ruta balcánica” han aumentado considerablemente, generando presión por parte de las autoridades cantonales, que asumen los costos de alojamiento y asistencia social. Los partidos de centro-derecha sostienen que la credibilidad de la tradición humanitaria suiza depende de demostrar simultáneamente un control efectivo sobre quién puede establecerse y trabajar en el país.
Medidas clave y su funcionamiento:
• En 2026 se otorgarán 35,000 permisos para trabajadores altamente cualificados de terceros países (frente a un régimen previo sin límite).
• El nuevo “test de mercado laboral plus” exige a los empleadores demostrar no solo que no hay candidatos adecuados en Suiza o la UE/AELC, sino también que han implementado planes de reciclaje profesional para el personal local.
• El Comando de la Guardia Fronteriza (parte de la Oficina Suiza de Aduanas y Seguridad Fronteriza) recibirá 120 millones de francos suizos para instalar estaciones biométricas fijas en 11 pasos secundarios por carretera con Italia y Francia, complementando los controles EES en aeropuertos.
• Asilo acelerado: procedimientos simplificados para nacionales de cinco países “manifiestamente seguros” y presentación digital exclusiva para reducir la burocracia.
Implicaciones para las empresas: Los empleadores multinacionales deberán reservar las cuotas con mucha antelación y aportar pruebas más sólidas de sus esfuerzos de reclutamiento. En la práctica, las grandes empresas podrían trasladar algunos puestos a centros cercanos en la UE, mientras que las pymes, especialmente en farmacéutica y manufactura avanzada, enfrentarán plazos más largos para incorporar especialistas. Los equipos de movilidad global deberán ajustar los cronogramas de proyectos, actualizar las proyecciones de costos (honorarios legales, auditorías de cumplimiento) y revisar las estrategias de captación de talento.
Reacción de los actores involucrados: Economiesuisse advirtió que las cuotas rígidas podrían afectar la competitividad de Suiza, señalando que el 46 % del personal de I+D en ciencias de la vida no es suizo. Los sindicatos recibieron con cautela los tests laborales más estrictos, pero criticaron la falta de inspectores adicionales para combatir el dumping salarial. ONG como el Consejo Suizo para Refugiados temen que la aceleración de los procedimientos de asilo pueda poner en riesgo las garantías del debido proceso. El Consejo Federal prometió una primera evaluación de impacto para mediados de 2027.
Próximos pasos: La nueva ley entrará en vigor el 1 de enero de 2026, con las ordenanzas de aplicación previstas para la primera semana de diciembre. Las empresas deben estar atentas a las directrices cantonales, especialmente en Zúrich, Basilea y Vaud, que juntos emiten más de la mitad de todos los permisos de trabajo, para ajustar calendarios de solicitud y plantillas de documentación.









