
A partir del 15 de noviembre, los titulares de pasaportes nepaleses que permanezcan en la zona de tránsito del Aeropuerto Internacional de Hong Kong ya no necesitarán visa de tránsito, poniendo fin a un requisito vigente durante 20 años desde 2005. El Departamento de Inmigración confirmó este cambio en un aviso oficial del 14 de noviembre, enmarcándolo como parte de los esfuerzos de Hong Kong para fortalecer la conectividad de la iniciativa Belt and Road y consolidar su posición como un centro internacional de aviación.
Esta medida llega tras una intensa campaña de presión por parte de Katmandú y el Consulado General de Nepal en Hong Kong, que argumentaron que la tarifa de HK$250 por la visa de tránsito y el proceso de varios días desalentaban a trabajadores migrantes, estudiantes y viajeros de negocios que dependen de la amplia red aérea de Hong Kong. Las autoridades nepalesas celebraron la decisión como un “logro significativo” que simplificará los itinerarios de los aproximadamente 60,000 nepaleses que transitan por la Región Administrativa Especial cada año rumbo al Golfo, Europa y Norteamérica.
Las aerolíneas se beneficiarán de inmediato: compañías como Cathay Pacific, Nepal Airlines y Qatar Airways podrán ofrecer rutas más cortas con un solo boleto a través de Hong Kong sin advertir a los clientes sobre trámites adicionales. Las agencias de gestión de viajes estiman que los tiempos promedio de reserva para pasajeros corporativos se reducirán entre dos y tres días.
Para los equipos de movilidad global, la implicación práctica es que los asignados nepaleses ahora pueden elegir Hong Kong como punto de conexión preferido, lo que podría reducir los costos de pasajes aéreos. Sin embargo, los empleadores deben recordar a los viajeros que la exención de visa aplica estrictamente a quienes permanezcan dentro del área restringida; salir del aeropuerto sigue requiriendo una visa de visita estándar o el esquema de admisión para migrantes calificados para estancias más prolongadas.
Los expertos señalan que Hong Kong probablemente evaluará futuras flexibilizaciones específicas para otros países de la iniciativa Belt and Road tras analizar los datos de seguridad del periodo de prueba con Nepal. De resultar exitoso, podrían implementarse exenciones similares para países como Bangladesh o Sri Lanka, aumentando la competitividad de la ciudad frente a Singapur y Doha.
Esta medida llega tras una intensa campaña de presión por parte de Katmandú y el Consulado General de Nepal en Hong Kong, que argumentaron que la tarifa de HK$250 por la visa de tránsito y el proceso de varios días desalentaban a trabajadores migrantes, estudiantes y viajeros de negocios que dependen de la amplia red aérea de Hong Kong. Las autoridades nepalesas celebraron la decisión como un “logro significativo” que simplificará los itinerarios de los aproximadamente 60,000 nepaleses que transitan por la Región Administrativa Especial cada año rumbo al Golfo, Europa y Norteamérica.
Las aerolíneas se beneficiarán de inmediato: compañías como Cathay Pacific, Nepal Airlines y Qatar Airways podrán ofrecer rutas más cortas con un solo boleto a través de Hong Kong sin advertir a los clientes sobre trámites adicionales. Las agencias de gestión de viajes estiman que los tiempos promedio de reserva para pasajeros corporativos se reducirán entre dos y tres días.
Para los equipos de movilidad global, la implicación práctica es que los asignados nepaleses ahora pueden elegir Hong Kong como punto de conexión preferido, lo que podría reducir los costos de pasajes aéreos. Sin embargo, los empleadores deben recordar a los viajeros que la exención de visa aplica estrictamente a quienes permanezcan dentro del área restringida; salir del aeropuerto sigue requiriendo una visa de visita estándar o el esquema de admisión para migrantes calificados para estancias más prolongadas.
Los expertos señalan que Hong Kong probablemente evaluará futuras flexibilizaciones específicas para otros países de la iniciativa Belt and Road tras analizar los datos de seguridad del periodo de prueba con Nepal. De resultar exitoso, podrían implementarse exenciones similares para países como Bangladesh o Sri Lanka, aumentando la competitividad de la ciudad frente a Singapur y Doha.








