
Una serie de testimonios en primera persona publicados por The Guardian el 15 de noviembre refleja la creciente preocupación entre los migrantes cualificados ante la propuesta de reforma migratoria de Reform UK. El partido de derecha ha prometido eliminar el permiso de residencia indefinida (ILR) y elevar el umbral salarial para trabajadores cualificados a unos £60,000, casi un 45% por encima del nivel actual. Entre los entrevistados se encuentran un médico estadounidense de urgencias, un ingeniero de defensa indio y un trabajador humanitario sirio, quienes temen perder el derecho a establecerse a pesar de sus años de contribución a la economía británica.
El artículo destaca el riesgo político que enfrentan las multinacionales, ya que la inmigración se ha convertido en un tema candente de cara a las elecciones generales de 2026. Las empresas que dependen del talento extranjero en sectores como la salud, la ingeniería y la tecnología podrían enfrentar dificultades para retener a sus empleados si desaparecen o se encarecen las vías para obtener la residencia.
Los asesores en movilidad global señalan que la elegibilidad para el ILR es un incentivo clave para profesionales en mitad de su carrera que aceptan salarios por debajo del mercado a cambio de seguridad a largo plazo. La incertidumbre sobre las futuras normativas ya complica la planificación de la plantilla; algunas compañías están explorando centros en la UE, como Dublín o Ámsterdam, como ubicaciones alternativas.
Aunque Reform UK aún está por detrás de los dos principales partidos en las encuestas, su avance ha obligado a laboristas y conservadores a competir en dureza, añadiendo más volatilidad al panorama político. Las empresas deberían planificar escenarios con umbrales salariales que oscilen entre £41,700 y £60,000, y considerar solicitar el ILR anticipadamente para el personal que cumpla con las normas actuales.
El artículo destaca el riesgo político que enfrentan las multinacionales, ya que la inmigración se ha convertido en un tema candente de cara a las elecciones generales de 2026. Las empresas que dependen del talento extranjero en sectores como la salud, la ingeniería y la tecnología podrían enfrentar dificultades para retener a sus empleados si desaparecen o se encarecen las vías para obtener la residencia.
Los asesores en movilidad global señalan que la elegibilidad para el ILR es un incentivo clave para profesionales en mitad de su carrera que aceptan salarios por debajo del mercado a cambio de seguridad a largo plazo. La incertidumbre sobre las futuras normativas ya complica la planificación de la plantilla; algunas compañías están explorando centros en la UE, como Dublín o Ámsterdam, como ubicaciones alternativas.
Aunque Reform UK aún está por detrás de los dos principales partidos en las encuestas, su avance ha obligado a laboristas y conservadores a competir en dureza, añadiendo más volatilidad al panorama político. Las empresas deberían planificar escenarios con umbrales salariales que oscilen entre £41,700 y £60,000, y considerar solicitar el ILR anticipadamente para el personal que cumpla con las normas actuales.










