
Los viajeros de negocios que pasaron por Suiza el 13 de noviembre enfrentaron un recordatorio incómodo de cómo el clima invernal y la falta de personal pueden complicar incluso los aeropuertos mejor gestionados. Fuertes vientos costeros que azotaron el noroeste de Europa coincidieron con una escasez continua de controladores aéreos, lo que provocó la cancelación de 30 vuelos y 449 retrasos en todo el continente. Swiss International Air Lines (SWISS) canceló varias rotaciones de primera hora desde Ginebra y Zúrich, mientras que su socio Lufthansa desvió varios vuelos con destino a Zúrich hacia Basilea y Milán para aliviar la congestión en las plataformas.
Según datos operativos citados por Travel & Tour World, la puntualidad en las salidas del aeropuerto de Zúrich cayó al 71%, muy por debajo del promedio anual del 84%. Las colas en el control de pasaportes del Airside Center llegaron a los 40 minutos, mientras los pasajeros con nuevos billetes corrían para alcanzar sus conexiones. Aunque la interrupción fue menor en comparación con los picos de julio, los gestores de movilidad corporativa señalaron que afectó a viajeros de alto valor que conectaban con rutas de larga distancia en sectores bancario y farmacéutico.
MeteoSwiss había emitido una alerta por baja presión 18 horas antes, pero muchos pasajeros desconocían que las unidades de control aéreo francesas y del Benelux también operaban con personal reducido debido a la formación en el próximo Sistema de Entrada/Salida Schengen (EES). Eurocontrol advierte ahora de un déficit de capacidad del 12% este invierno, lo que sugiere que podrían repetirse interrupciones repentinas similares.
Para las empresas, este incidente resalta la importancia de contar con paneles de control en tiempo real y políticas proactivas de reubicación. SWISS reubicó automáticamente a la mayoría de los pasajeros, pero limitó los vales de hotel a retrasos superiores a seis horas según la normativa EU261. Los asesores de movilidad recomiendan que las compañías que usan herramientas de reserva en autoservicio incentiven a los viajeros a aceptar opciones automáticas en lugar de hacer cola en los mostradores.
Aunque las cancelaciones del jueves se resolvieron a última hora de la tarde, los equipos de gestión de riesgos de viaje se preparan para más volatilidad, ya que la inscripción biométrica en el EES ralentiza los procesos en las puertas de embarque y el clima invernal se intensifica. Los especialistas en deber de cuidado aconsejan plantillas de aprobación de viajes que incluyan un margen de 30 minutos para conexiones dentro de Schengen a través de Zúrich o Ginebra, desde ahora hasta marzo de 2026.
Según datos operativos citados por Travel & Tour World, la puntualidad en las salidas del aeropuerto de Zúrich cayó al 71%, muy por debajo del promedio anual del 84%. Las colas en el control de pasaportes del Airside Center llegaron a los 40 minutos, mientras los pasajeros con nuevos billetes corrían para alcanzar sus conexiones. Aunque la interrupción fue menor en comparación con los picos de julio, los gestores de movilidad corporativa señalaron que afectó a viajeros de alto valor que conectaban con rutas de larga distancia en sectores bancario y farmacéutico.
MeteoSwiss había emitido una alerta por baja presión 18 horas antes, pero muchos pasajeros desconocían que las unidades de control aéreo francesas y del Benelux también operaban con personal reducido debido a la formación en el próximo Sistema de Entrada/Salida Schengen (EES). Eurocontrol advierte ahora de un déficit de capacidad del 12% este invierno, lo que sugiere que podrían repetirse interrupciones repentinas similares.
Para las empresas, este incidente resalta la importancia de contar con paneles de control en tiempo real y políticas proactivas de reubicación. SWISS reubicó automáticamente a la mayoría de los pasajeros, pero limitó los vales de hotel a retrasos superiores a seis horas según la normativa EU261. Los asesores de movilidad recomiendan que las compañías que usan herramientas de reserva en autoservicio incentiven a los viajeros a aceptar opciones automáticas en lugar de hacer cola en los mostradores.
Aunque las cancelaciones del jueves se resolvieron a última hora de la tarde, los equipos de gestión de riesgos de viaje se preparan para más volatilidad, ya que la inscripción biométrica en el EES ralentiza los procesos en las puertas de embarque y el clima invernal se intensifica. Los especialistas en deber de cuidado aconsejan plantillas de aprobación de viajes que incluyan un margen de 30 minutos para conexiones dentro de Schengen a través de Zúrich o Ginebra, desde ahora hasta marzo de 2026.










