
El sindicato Public and Commercial Services (PCS) confirmó el 13 de noviembre de 2025 que más de 120 oficiales marítimos de la Fuerza Fronteriza realizarán una huelga de 24 horas el viernes 14 de noviembre para protestar por seis años de negociaciones estancadas sobre las asignaciones especiales y cambios en los términos y condiciones laborales. Estos oficiales tripulan las embarcaciones de patrulla costera del Reino Unido que interceptan cruces en pequeñas embarcaciones, inspeccionan el transporte comercial en busca de contrabando y apoyan operaciones antiterroristas.
Aunque los controles de pasaportes en aeropuertos y puntos fijos no se verán afectados, la huelga amenaza con dejar el Canal de la Mancha con una “red de seguridad mínima” durante una de las semanas más intensas para el transporte de carga y pasajeros previo a la Navidad. Las navieras Stena Line y P&O Ferries informaron a sus clientes que es probable que se produzcan retrasos en los controles de embarque y en las inspecciones en medio del canal, y recomendaron a los transportistas de mercancías prever tiempos adicionales al planificar rutas por Dover y Folkestone.
El momento es delicado para el gobierno laborista, cuyo nuevo acuerdo de “Un Entrada-Un Salida” con Francia depende en gran medida de un procesamiento rápido en alta mar para disuadir a las redes de tráfico de personas. El grupo empresarial Logistics UK advirtió que cualquier reducción prolongada en la capacidad de patrulla podría fomentar cruces clandestinos y aumentar los costos de seguro para los transportistas que operan en Kent, señalando que “las relaciones laborales en la frontera ahora representan el mismo riesgo comercial que las condiciones meteorológicas extremas”.
Desde la perspectiva de la gestión de movilidad, los empleadores con empleados que habitualmente transitan por ferry o el Eurotúnel deberían estar atentos a las alertas de las compañías y considerar rutas alternativas por aire o Eurostar en caso de que la huelga se prolongue. Los abogados de inmigración también advierten que las entrevistas migratorias a bordo —comunes en ferris hacia Francia y los Países Bajos— podrían suspenderse, lo que aumentaría el escrutinio a los viajeros al llegar. Se recomienda a las empresas recordar a su personal en viaje que lleve consigo pruebas de su estatus migratorio en el Reino Unido y que prevean posibles interrogatorios en los puertos.
Aunque PCS no descarta nuevas huelgas, mantiene abierta la posibilidad de negociaciones de última hora. Un portavoz del Ministerio del Interior declaró que equipos de contingencia y “recursos militares marítimos” están listos para cubrir los vacíos, pero admitió que “alguna interrupción para viajeros y operadores de carga es inevitable”.
Aunque los controles de pasaportes en aeropuertos y puntos fijos no se verán afectados, la huelga amenaza con dejar el Canal de la Mancha con una “red de seguridad mínima” durante una de las semanas más intensas para el transporte de carga y pasajeros previo a la Navidad. Las navieras Stena Line y P&O Ferries informaron a sus clientes que es probable que se produzcan retrasos en los controles de embarque y en las inspecciones en medio del canal, y recomendaron a los transportistas de mercancías prever tiempos adicionales al planificar rutas por Dover y Folkestone.
El momento es delicado para el gobierno laborista, cuyo nuevo acuerdo de “Un Entrada-Un Salida” con Francia depende en gran medida de un procesamiento rápido en alta mar para disuadir a las redes de tráfico de personas. El grupo empresarial Logistics UK advirtió que cualquier reducción prolongada en la capacidad de patrulla podría fomentar cruces clandestinos y aumentar los costos de seguro para los transportistas que operan en Kent, señalando que “las relaciones laborales en la frontera ahora representan el mismo riesgo comercial que las condiciones meteorológicas extremas”.
Desde la perspectiva de la gestión de movilidad, los empleadores con empleados que habitualmente transitan por ferry o el Eurotúnel deberían estar atentos a las alertas de las compañías y considerar rutas alternativas por aire o Eurostar en caso de que la huelga se prolongue. Los abogados de inmigración también advierten que las entrevistas migratorias a bordo —comunes en ferris hacia Francia y los Países Bajos— podrían suspenderse, lo que aumentaría el escrutinio a los viajeros al llegar. Se recomienda a las empresas recordar a su personal en viaje que lleve consigo pruebas de su estatus migratorio en el Reino Unido y que prevean posibles interrogatorios en los puertos.
Aunque PCS no descarta nuevas huelgas, mantiene abierta la posibilidad de negociaciones de última hora. Un portavoz del Ministerio del Interior declaró que equipos de contingencia y “recursos militares marítimos” están listos para cubrir los vacíos, pero admitió que “alguna interrupción para viajeros y operadores de carga es inevitable”.








