
Los viajeros que vuelan con Ryanair desde Bruselas Zaventem o Charleroi despertaron el 12 de noviembre en una realidad sin papel: la aerolínea de bajo costo ha implementado pases de abordar 100 % digitales en toda su red. Ya no se aceptan PDFs impresos ni pases impresos en casa en los controles de seguridad ni en la puerta de embarque. Los pasajeros deben mostrar un código QR generado en la aplicación móvil ‘myRyanair’.
Este cambio, originalmente previsto para mayo y pospuesto dos veces, llega en un periodo de viaje relativamente tranquilo, lo que reduce el riesgo de colas mientras el personal se adapta. Ryanair asegura que esta medida eliminará 300 toneladas de papel al año y facilitará la gestión de incidencias, ya que los pases digitales se actualizan automáticamente cuando se reprograman los vuelos.
Sin embargo, la organización belga de defensa del consumidor Testachats califica la política de “discriminatoria”, señalando que el 8 % de los residentes belgas mayores de 16 años no poseen un teléfono inteligente. Ryanair responde que los pasajeros sin dispositivos inteligentes aún pueden hacer el check-in online y imprimir el correo de confirmación, pero deberán acudir al mostrador de facturación —lo que implica una tasa de reemisión en el aeropuerto de 55 €— para obtener un documento de viaje.
Para los programas de viajes corporativos, la tarea clave es asegurarse de que los empleados descarguen la aplicación antes de la salida y tengan acceso a roaming o Wi-Fi en el aeropuerto para obtener el pase. Los gestores de viajes deben actualizar las políticas para reflejar el posible coste adicional si los empleados llegan solo con un pase en papel. Las empresas con plataformas de duty of care vinculadas a la API de Ryanair pueden beneficiarse de actualizaciones en tiempo real del estado del vuelo integradas en el pase digital.
El movimiento de la aerolínea probablemente aumentará la presión sobre Brussels Airlines y TUI fly para acelerar sus propios lanzamientos de pases digitales. Brussels Airport Company afirma que sus escáneres de e-gates ya están configurados para códigos QR móviles, pero recomienda a los viajeros mantener el brillo del dispositivo alto y retirar fundas gruesas para evitar problemas al escanear.
Este cambio, originalmente previsto para mayo y pospuesto dos veces, llega en un periodo de viaje relativamente tranquilo, lo que reduce el riesgo de colas mientras el personal se adapta. Ryanair asegura que esta medida eliminará 300 toneladas de papel al año y facilitará la gestión de incidencias, ya que los pases digitales se actualizan automáticamente cuando se reprograman los vuelos.
Sin embargo, la organización belga de defensa del consumidor Testachats califica la política de “discriminatoria”, señalando que el 8 % de los residentes belgas mayores de 16 años no poseen un teléfono inteligente. Ryanair responde que los pasajeros sin dispositivos inteligentes aún pueden hacer el check-in online y imprimir el correo de confirmación, pero deberán acudir al mostrador de facturación —lo que implica una tasa de reemisión en el aeropuerto de 55 €— para obtener un documento de viaje.
Para los programas de viajes corporativos, la tarea clave es asegurarse de que los empleados descarguen la aplicación antes de la salida y tengan acceso a roaming o Wi-Fi en el aeropuerto para obtener el pase. Los gestores de viajes deben actualizar las políticas para reflejar el posible coste adicional si los empleados llegan solo con un pase en papel. Las empresas con plataformas de duty of care vinculadas a la API de Ryanair pueden beneficiarse de actualizaciones en tiempo real del estado del vuelo integradas en el pase digital.
El movimiento de la aerolínea probablemente aumentará la presión sobre Brussels Airlines y TUI fly para acelerar sus propios lanzamientos de pases digitales. Brussels Airport Company afirma que sus escáneres de e-gates ya están configurados para códigos QR móviles, pero recomienda a los viajeros mantener el brillo del dispositivo alto y retirar fundas gruesas para evitar problemas al escanear.









