
El 11 de noviembre, la aerolínea nacional de Austria actualizó su portal de consejos de viaje para emitir un recordatorio contundente: a partir del 2 de abril de 2025, todos los ciudadanos europeos exentos de visa —incluidos los austriacos— deberán contar con una Autorización Electrónica de Viaje (ETA) del Reino Unido antes de abordar vuelos hacia Gran Bretaña. Los viajeros exentos de visa no europeos estarán sujetos a este requisito aún antes, desde el 8 de enero de 2025.
La ETA es un permiso completamente digital vinculado al pasaporte del viajero, válido por dos años (o hasta que expire el pasaporte) y tiene un costo de £10. Las solicitudes se realizan a través de la aplicación o el sitio web del Ministerio del Interior del Reino Unido y deben presentarse al menos 72 horas antes de la salida. Las aerolíneas son responsables y pueden ser multadas si transportan pasajeros sin la autorización válida, por lo que los agentes de facturación deberán verificar el estado de la ETA junto con la Información Avanzada de Pasajeros.
¿Por qué es importante esto para las empresas austriacas? La ruta Viena–Londres sigue siendo una de las principales para Austrian Airlines en el segmento corporativo, con empresas de finanzas, ciencias de la vida y tecnología enviando viajeros semanales. Los gestores de movilidad deben integrar la verificación de la ETA en las herramientas de reserva online y registrar la fecha de vencimiento de dos años en los perfiles de los viajeros para evitar solicitudes de última hora. Los reclutadores que envíen candidatos a entrevistas en el Reino Unido después de abril también deben considerar el plazo de tres días para la solicitud.
El gobierno británico sostiene que la ETA permitirá un mayor control de riesgos antes de la llegada y, eventualmente, reducirá las colas en los controles electrónicos. Los titulares de pasaportes austriacos actualmente pasan por Heathrow en unos 15 minutos en promedio; las autoridades aseguran que el nuevo sistema mantendrá ese nivel de eficiencia. Sin embargo, no obtener la ETA implicará la denegación de embarque, un error costoso para viajes con tiempos críticos. Por ello, los equipos de comunicación corporativa deberían lanzar campañas de concienciación antes del aumento de viajes en Navidad.
La ETA es un permiso completamente digital vinculado al pasaporte del viajero, válido por dos años (o hasta que expire el pasaporte) y tiene un costo de £10. Las solicitudes se realizan a través de la aplicación o el sitio web del Ministerio del Interior del Reino Unido y deben presentarse al menos 72 horas antes de la salida. Las aerolíneas son responsables y pueden ser multadas si transportan pasajeros sin la autorización válida, por lo que los agentes de facturación deberán verificar el estado de la ETA junto con la Información Avanzada de Pasajeros.
¿Por qué es importante esto para las empresas austriacas? La ruta Viena–Londres sigue siendo una de las principales para Austrian Airlines en el segmento corporativo, con empresas de finanzas, ciencias de la vida y tecnología enviando viajeros semanales. Los gestores de movilidad deben integrar la verificación de la ETA en las herramientas de reserva online y registrar la fecha de vencimiento de dos años en los perfiles de los viajeros para evitar solicitudes de última hora. Los reclutadores que envíen candidatos a entrevistas en el Reino Unido después de abril también deben considerar el plazo de tres días para la solicitud.
El gobierno británico sostiene que la ETA permitirá un mayor control de riesgos antes de la llegada y, eventualmente, reducirá las colas en los controles electrónicos. Los titulares de pasaportes austriacos actualmente pasan por Heathrow en unos 15 minutos en promedio; las autoridades aseguran que el nuevo sistema mantendrá ese nivel de eficiencia. Sin embargo, no obtener la ETA implicará la denegación de embarque, un error costoso para viajes con tiempos críticos. Por ello, los equipos de comunicación corporativa deberían lanzar campañas de concienciación antes del aumento de viajes en Navidad.









