
El Departamento de Estado ha distribuido discretamente nuevas instrucciones a las secciones consulares en todo el mundo, ordenando a los oficiales que consideren las condiciones médicas actuales del solicitante y su capacidad para costear el tratamiento al decidir si emitir una visa. El comunicado, fechado el 7 de noviembre y confirmado por varias oficinas, entró en vigor el 8 de noviembre de 2025 y se aplica a todas las categorías de visas no inmigrantes e inmigrantes.
Según las normas vigentes, los solicitantes ya deben demostrar que no es probable que se conviertan en una “carga pública”. Sin embargo, la nueva directriz amplía este criterio más allá de las enfermedades transmisibles, incluyendo una lista mucho más amplia de condiciones crónicas, como diabetes, enfermedades cardíacas, obesidad, cáncer y ciertos diagnósticos de salud mental. Ahora, los oficiales pueden solicitar documentación adicional, como resultados recientes de laboratorio, prueba de seguro válido en Estados Unidos o evidencia de fondos personales suficientes para cubrir el tratamiento de por vida.
Expertos señalan que esta política marca la primera vez que enfermedades rutinarias no transmisibles son consideradas como posibles motivos de rechazo. Abogados especializados en inmigración empresarial advierten a los equipos de movilidad corporativa que incluyan tiempo extra en la planificación de asignaciones, especialmente para empleados mayores y sus familiares dependientes. Varias multinacionales ya han comenzado a exigir exámenes médicos previos a la asignación y una cobertura de seguro mejorada para evitar denegaciones de visa de último momento.
Para proveedores de salud y aseguradoras, esta directiva podría generar una nueva demanda de planes médicos internacionales portátiles patrocinados por empleadores. Por otro lado, los críticos argumentan que otorga demasiada discrecionalidad a oficiales de visa sin la formación adecuada y que podría derivar en resultados discriminatorios, especialmente contra solicitantes de países en desarrollo donde es más difícil verificar los registros médicos.
A corto plazo, las empresas deben esperar procesos administrativos más largos y estar preparadas para demostrar que el paquete de compensación del empleado cubrirá completamente los costos médicos previstos. También se recomienda a los responsables de movilidad que alerten a los ejecutivos que viajan bajo el programa de Exención de Visa / ESTA, ya que ellos también podrían enfrentar interrogatorios secundarios a su llegada sobre problemas médicos crónicos y prueba de cobertura.
Según las normas vigentes, los solicitantes ya deben demostrar que no es probable que se conviertan en una “carga pública”. Sin embargo, la nueva directriz amplía este criterio más allá de las enfermedades transmisibles, incluyendo una lista mucho más amplia de condiciones crónicas, como diabetes, enfermedades cardíacas, obesidad, cáncer y ciertos diagnósticos de salud mental. Ahora, los oficiales pueden solicitar documentación adicional, como resultados recientes de laboratorio, prueba de seguro válido en Estados Unidos o evidencia de fondos personales suficientes para cubrir el tratamiento de por vida.
Expertos señalan que esta política marca la primera vez que enfermedades rutinarias no transmisibles son consideradas como posibles motivos de rechazo. Abogados especializados en inmigración empresarial advierten a los equipos de movilidad corporativa que incluyan tiempo extra en la planificación de asignaciones, especialmente para empleados mayores y sus familiares dependientes. Varias multinacionales ya han comenzado a exigir exámenes médicos previos a la asignación y una cobertura de seguro mejorada para evitar denegaciones de visa de último momento.
Para proveedores de salud y aseguradoras, esta directiva podría generar una nueva demanda de planes médicos internacionales portátiles patrocinados por empleadores. Por otro lado, los críticos argumentan que otorga demasiada discrecionalidad a oficiales de visa sin la formación adecuada y que podría derivar en resultados discriminatorios, especialmente contra solicitantes de países en desarrollo donde es más difícil verificar los registros médicos.
A corto plazo, las empresas deben esperar procesos administrativos más largos y estar preparadas para demostrar que el paquete de compensación del empleado cubrirá completamente los costos médicos previstos. También se recomienda a los responsables de movilidad que alerten a los ejecutivos que viajan bajo el programa de Exención de Visa / ESTA, ya que ellos también podrían enfrentar interrogatorios secundarios a su llegada sobre problemas médicos crónicos y prueba de cobertura.











