Hablando con periodistas en Bruselas el 6 de noviembre, el portavoz de la Comisión Europea, Markus Lammert, confirmó que la Comisión está “estudiando medidas adicionales” para restringir aún más la emisión de visados Schengen a ciudadanos rusos. Lammert no quiso dar detalles, pero varios medios informan que el Ejecutivo está considerando suspender los visados de entradas múltiples y pasar a permisos de entrada única, emitidos solo por razones humanitarias o familiares.
Para Finlandia, que comparte la frontera terrestre exterior más larga de la UE con Rusia, esta medida podría reducir drásticamente el número de viajes de ocio y compras de rusos que antes transitaban por los pasos fronterizos de Vaalimaa y Nuijamaa, cerrados en 2023. Aunque los puntos de control terrestres sigan cerrados, hasta ahora los rusos podían volar a Helsinki vía terceros países con visados Schengen de entradas múltiples; especialistas en reubicación corporativa advierten que esos viajes pronto podrían requerir nuevos trámites para cada desplazamiento.
![La UE confirma que trabaja en nuevas restricciones de visado Schengen para ciudadanos rusos]()
Comerciantes y hoteleros finlandeses, ya afectados por las restricciones en la frontera oriental, se preparan para una pérdida prolongada de clientes rusos de alto poder adquisitivo. Por otro lado, las autoridades de seguridad ven con buenos ojos esta posibilidad, argumentando que los visados de entrada única facilitan la detección de abusos y estancias irregulares.
La Comisión consultará ahora a los Estados miembros; los diplomáticos esperan una propuesta formal antes de fin de año. Los responsables de movilidad que gestionan traslados entre Rusia y Finlandia deben prepararse para tiempos de tramitación más largos, mayores costes legales y la posibilidad de que las reuniones presenciales tengan que pasar a formato virtual si desaparecen los visados para viajes repetidos.
Para Finlandia, que comparte la frontera terrestre exterior más larga de la UE con Rusia, esta medida podría reducir drásticamente el número de viajes de ocio y compras de rusos que antes transitaban por los pasos fronterizos de Vaalimaa y Nuijamaa, cerrados en 2023. Aunque los puntos de control terrestres sigan cerrados, hasta ahora los rusos podían volar a Helsinki vía terceros países con visados Schengen de entradas múltiples; especialistas en reubicación corporativa advierten que esos viajes pronto podrían requerir nuevos trámites para cada desplazamiento.
Comerciantes y hoteleros finlandeses, ya afectados por las restricciones en la frontera oriental, se preparan para una pérdida prolongada de clientes rusos de alto poder adquisitivo. Por otro lado, las autoridades de seguridad ven con buenos ojos esta posibilidad, argumentando que los visados de entrada única facilitan la detección de abusos y estancias irregulares.
La Comisión consultará ahora a los Estados miembros; los diplomáticos esperan una propuesta formal antes de fin de año. Los responsables de movilidad que gestionan traslados entre Rusia y Finlandia deben prepararse para tiempos de tramitación más largos, mayores costes legales y la posibilidad de que las reuniones presenciales tengan que pasar a formato virtual si desaparecen los visados para viajes repetidos.
