
Bruselas – El Consejo Nacional de Seguridad (CNS) de Bélgica actuó rápidamente el jueves 6 de noviembre de 2025 para cerrar una evidente brecha en la defensa del espacio aéreo del país. Tras dos noches de avistamientos misteriosos de drones que obligaron al cierre temporal de cinco aeropuertos y sobrevolaron al menos tres bases militares, el CNS aprobó la creación de un Centro Nacional Permanente de Seguridad del Espacio Aéreo (CNSEA) en Beauvechain.
El ministro de Defensa, Theo Francken, informó a los medios que el CNSEA entrará en funcionamiento el 1 de enero de 2026 y funcionará como un centro único de mando y control que conectará la red de radares de la fuerza aérea con la policía federal, aduanas, el regulador de aviación civil y los servicios de inteligencia. Este nuevo organismo compartirá datos en tiempo real entre agencias e implementará procedimientos comunes para la detección, identificación y neutralización de drones no autorizados. Se presentará un paquete de inversión de 50 millones de euros —que incluye inhibidores, antenas direccionales y “pistolas para drones”— en la reunión del Consejo de Ministros del viernes.
Francken también anunció que Bélgica invitará a la OTAN y a los países vecinos a integrar sus sistemas de sensores, destacando la naturaleza transfronteriza de las aeronaves no tripuladas. El ministro del Interior, Bernard Quintin, confirmó que se está elaborando un marco legal para permitir a la policía desactivar drones que representen una amenaza para sitios críticos como el Aeropuerto de Bruselas, el Puerto de Amberes o instalaciones nucleares. Aunque las autoridades evitaron señalar responsables, ambos ministros insinuaron que podría tratarse de sondeos rusos sobre infraestructuras de la OTAN, recordando que incidentes similares han afectado a Dinamarca, Alemania y Suecia en los últimos meses.
Para las empresas que movilizan personal y mercancías a través de Bélgica, el centro promete una comunicación más rápida y clara cuando se cierre el espacio aéreo, además de un punto de contacto común para actualizaciones sobre incidentes. Sin embargo, los empleadores deben prepararse para controles de seguridad previos al vuelo más estrictos y posibles solicitudes de compartir con antelación los manifiestos de pasajeros y carga mientras se implementan los nuevos sistemas. Se recomienda a los gestores de movilidad global revisar sus políticas de riesgo de viaje y mantener a los empleados con billetes flexibles hasta que el CNSEA esté plenamente operativo.
El ministro de Defensa, Theo Francken, informó a los medios que el CNSEA entrará en funcionamiento el 1 de enero de 2026 y funcionará como un centro único de mando y control que conectará la red de radares de la fuerza aérea con la policía federal, aduanas, el regulador de aviación civil y los servicios de inteligencia. Este nuevo organismo compartirá datos en tiempo real entre agencias e implementará procedimientos comunes para la detección, identificación y neutralización de drones no autorizados. Se presentará un paquete de inversión de 50 millones de euros —que incluye inhibidores, antenas direccionales y “pistolas para drones”— en la reunión del Consejo de Ministros del viernes.
Francken también anunció que Bélgica invitará a la OTAN y a los países vecinos a integrar sus sistemas de sensores, destacando la naturaleza transfronteriza de las aeronaves no tripuladas. El ministro del Interior, Bernard Quintin, confirmó que se está elaborando un marco legal para permitir a la policía desactivar drones que representen una amenaza para sitios críticos como el Aeropuerto de Bruselas, el Puerto de Amberes o instalaciones nucleares. Aunque las autoridades evitaron señalar responsables, ambos ministros insinuaron que podría tratarse de sondeos rusos sobre infraestructuras de la OTAN, recordando que incidentes similares han afectado a Dinamarca, Alemania y Suecia en los últimos meses.
Para las empresas que movilizan personal y mercancías a través de Bélgica, el centro promete una comunicación más rápida y clara cuando se cierre el espacio aéreo, además de un punto de contacto común para actualizaciones sobre incidentes. Sin embargo, los empleadores deben prepararse para controles de seguridad previos al vuelo más estrictos y posibles solicitudes de compartir con antelación los manifiestos de pasajeros y carga mientras se implementan los nuevos sistemas. Se recomienda a los gestores de movilidad global revisar sus políticas de riesgo de viaje y mantener a los empleados con billetes flexibles hasta que el CNSEA esté plenamente operativo.









