
Después de más de tres años de detención en Irán, los ciudadanos franceses Cécile Kohler y Jacques Paris fueron trasladados el 4 de noviembre a la Residencia Francesa dentro del recinto de la embajada en Teherán. El Ministerio de Asuntos Exteriores calificó este avance como un “primer gesto” por parte de las autoridades iraníes y confirmó que los equipos consulares ya están trabajando en exámenes médicos y documentos de viaje para repatriar a la pareja.
Kohler y Paris, ambos profesores, fueron arrestados en mayo de 2022 bajo acusaciones de incitar disturbios. Su traslado bajo custodia de la embajada es el resultado de una prolongada diplomacia de ida y vuelta liderada por el Centro de Crisis y Apoyo de París, con el respaldo de mediadores de la UE en Mascate y Doha. Aunque aún no tienen permiso para salir de Irán, el traslado los saca de la prisión de Evin y los pone bajo protección francesa mientras se gestionan los permisos de salida.
Desde la perspectiva del riesgo de movilidad, este caso ilustra las vías diplomáticas disponibles cuando ciudadanos son detenidos en el extranjero y refuerza la importancia de registrar a viajeros de negocios y familiares acompañantes en el portal *Ariane* del MEAE. Las empresas con operaciones en jurisdicciones de mayor riesgo deben mantener protocolos de respuesta ante crisis y asegurarse de que sus empleados asignados conozcan las leyes locales sobre protestas y las restricciones mediáticas.
Este episodio también podría facilitar la reanudación de los programas de intercambio académico francés con universidades iraníes, muchos de los cuales fueron suspendidos tras los arrestos. Universities France ya está revisando su nivel de recomendación de viaje para investigadores que planean asistir a conferencias en Teherán e Isfahán a principios de 2026.
Las autoridades advirtieron que las negociaciones continúan y que aún no se ha fijado un calendario para la repatriación de los profesores. Sin embargo, una vez que lleguen a París, se espera que reciban apoyo postraumático a través de la unidad francesa dedicada a víctimas de terrorismo y secuestro, servicios a los que las multinacionales pueden recurrir para empleados en situaciones similares.
Kohler y Paris, ambos profesores, fueron arrestados en mayo de 2022 bajo acusaciones de incitar disturbios. Su traslado bajo custodia de la embajada es el resultado de una prolongada diplomacia de ida y vuelta liderada por el Centro de Crisis y Apoyo de París, con el respaldo de mediadores de la UE en Mascate y Doha. Aunque aún no tienen permiso para salir de Irán, el traslado los saca de la prisión de Evin y los pone bajo protección francesa mientras se gestionan los permisos de salida.
Desde la perspectiva del riesgo de movilidad, este caso ilustra las vías diplomáticas disponibles cuando ciudadanos son detenidos en el extranjero y refuerza la importancia de registrar a viajeros de negocios y familiares acompañantes en el portal *Ariane* del MEAE. Las empresas con operaciones en jurisdicciones de mayor riesgo deben mantener protocolos de respuesta ante crisis y asegurarse de que sus empleados asignados conozcan las leyes locales sobre protestas y las restricciones mediáticas.
Este episodio también podría facilitar la reanudación de los programas de intercambio académico francés con universidades iraníes, muchos de los cuales fueron suspendidos tras los arrestos. Universities France ya está revisando su nivel de recomendación de viaje para investigadores que planean asistir a conferencias en Teherán e Isfahán a principios de 2026.
Las autoridades advirtieron que las negociaciones continúan y que aún no se ha fijado un calendario para la repatriación de los profesores. Sin embargo, una vez que lleguen a París, se espera que reciban apoyo postraumático a través de la unidad francesa dedicada a víctimas de terrorismo y secuestro, servicios a los que las multinacionales pueden recurrir para empleados en situaciones similares.






