
El Ministerio del Interior italiano activó el Artículo 25a del Código de Fronteras Schengen a última hora del 3 de noviembre de 2025, reintroduciendo controles fronterizos temporales con Austria del 3 al 4 de noviembre de 2025. Esta medida excepcional busca mitigar riesgos para el orden público en torno al partido destacado de la UEFA Champions League entre SSC Napoli y Eintracht Frankfurt, programado para la noche del 4 de noviembre en Nápoles.
Aunque el periodo de control es breve, afecta dos de los pasos alpinos más transitados: Brennero (A13/A22) y Paso de Resia (B180/SS40), además de controles puntuales en los servicios ferroviarios EC y Nightjet con dirección sur. La policía italiana trabaja en conjunto con el Ministerio del Interior austríaco (BMI) y el personal de seguridad de ÖBB para identificar grupos de hooligans que viajan por tierra. El tráfico de mercancías está exento, aunque podría sufrir retrasos menores por cierres de carriles.
Para las empresas austriacas con cadenas de suministro que dependen de entregas just-in-time hacia el norte de Italia, estos controles temporales evidencian la fragilidad persistente de las fronteras internas de Schengen. Los proveedores logísticos recomiendan despachar cargas de alto valor antes o después de este periodo de 48 horas, o bien redirigirlas por Tarvisio (A2/A23), donde el tráfico es menor. Los viajeros de negocios con destino a Milán o Bolonia el 4 de noviembre deberían contemplar tiempos adicionales en sus itinerarios y llevar comprobantes de alojamiento para agilizar el paso.
Este episodio es la segunda suspensión relacionada con eventos deportivos en la libre circulación de este año, y ocurre semanas después de que Francia impusiera controles por la Copa Mundial de Rugby. Expertos en movilidad de la UE advierten que estas suspensiones específicas por eventos son cada vez más frecuentes, y que las empresas podrían necesitar integrar datos en tiempo real sobre el estado de las fronteras en sus procesos de aprobación de viajes.
Las autoridades italianas confirmaron que la frontera volverá a estar abierta a las 00:00 del 5 de noviembre, salvo incidentes imprevistos. El ministro del Interior austríaco, Gerhard Karner, valoró la “estrecha coordinación” y afirmó que la operación demuestra una eficaz cooperación policial transfronteriza sin comprometer de forma permanente el espacio Schengen.
Aunque el periodo de control es breve, afecta dos de los pasos alpinos más transitados: Brennero (A13/A22) y Paso de Resia (B180/SS40), además de controles puntuales en los servicios ferroviarios EC y Nightjet con dirección sur. La policía italiana trabaja en conjunto con el Ministerio del Interior austríaco (BMI) y el personal de seguridad de ÖBB para identificar grupos de hooligans que viajan por tierra. El tráfico de mercancías está exento, aunque podría sufrir retrasos menores por cierres de carriles.
Para las empresas austriacas con cadenas de suministro que dependen de entregas just-in-time hacia el norte de Italia, estos controles temporales evidencian la fragilidad persistente de las fronteras internas de Schengen. Los proveedores logísticos recomiendan despachar cargas de alto valor antes o después de este periodo de 48 horas, o bien redirigirlas por Tarvisio (A2/A23), donde el tráfico es menor. Los viajeros de negocios con destino a Milán o Bolonia el 4 de noviembre deberían contemplar tiempos adicionales en sus itinerarios y llevar comprobantes de alojamiento para agilizar el paso.
Este episodio es la segunda suspensión relacionada con eventos deportivos en la libre circulación de este año, y ocurre semanas después de que Francia impusiera controles por la Copa Mundial de Rugby. Expertos en movilidad de la UE advierten que estas suspensiones específicas por eventos son cada vez más frecuentes, y que las empresas podrían necesitar integrar datos en tiempo real sobre el estado de las fronteras en sus procesos de aprobación de viajes.
Las autoridades italianas confirmaron que la frontera volverá a estar abierta a las 00:00 del 5 de noviembre, salvo incidentes imprevistos. El ministro del Interior austríaco, Gerhard Karner, valoró la “estrecha coordinación” y afirmó que la operación demuestra una eficaz cooperación policial transfronteriza sin comprometer de forma permanente el espacio Schengen.









